El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el ministro de Salud, Nicolás Kreplak, firmaron el decreto que reglamenta la Ley 14.865 que regula el ejercicio de los licenciados en Instrumentación Quirúrgica, Organización y Asistencia de Quirófanos. "Para nosotros es una alegría, una fiesta y el punto cúlmine de la reivindicación de nuestra profesión. Esto viene a traer ayuda y a formalizar todas las acciones en la Provincia de Buenos Aires", dijo Diana Garcilazo, coordinadora de la licenciatura en Instrumentación Quirúrgica de la Universidad Nacional de José C. Paz (UNPAZ), en diálogo con BuenosAires/12.
La Ley de Instrumentación Quirúrgica había sido aprobada en 2016 bajo la gestión de María Eugenia Vidal pero no fue reglamentada por lo que, hasta ahora, tampoco se implementó. "Hay un montón de compañeras que trabajaron por la reglamentación de la Ley a lo largo de estos años y que la hayan firmado y formar parte de todo este proceso para nosotros es un gran reconocimiento y una ampliación de derechos para las trabajadoras y los trabajadores de la salud", señaló la instrumentista y agregó que "se está saldando una deuda pendiente".
Garcilazo destacó el rol de la militancia del colectivo de instrumentadoras en los años previos a la promulgación de la norma y recordó la omisión y la desatención de la ex gobernadora y aseguró que tuvieron que pasar cuatro años para que el reclamo regrese a la agenda de la discusión política provincial.
"Recién se retomó a finales del 2020 por decisión de Daniel Gollan, ministro de Salud por aquel entonces, y a eso se sumó un fuerte acompañamiento de la subsecretaria de Gestión de la Información, Educación Permanente y Fiscalización Leticia Ceriani, quien nos dio una mano tremenda y acompañó el proceso a lo largo de este tiempo. El ministro Kreplak fue el encargado de cerrar ese ciclo que viene a ampliar derechos", remarcó Garcilazo.
La coordinadora de la licenciatura también puso el acento en el acompañamiento permanente que le brinda la Asociación Argentina de Instrumentadores, que cuenta con dependencias en todo el país y que, por la particularidad del territorio, en la Provincia de Buenos Aires, tiene tres delegaciones. Las filiales de La Plata, Oeste y Mar del Plata se encargan de cubrir las necesidades de todos las y los instrumentadores en la región.
"Con esta ley estamos ampliando un derecho en todo el territorio pero en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, por ejemplo, las compañeras siguen luchando al igual que enfermería, técnicos en laboratorio y técnicos en radiología por esta misma profesionalización. Esto es importante remarcarlo porque denota que acá hay decisión política, acompañamiento y trabajo en conjunto", dijo.
El día a día del instrumentador quirúrgico es como el de cualquier trabajador o trabajadora de la salud. Con las particularidades de cada especialización, en el caso de las instrumentadoras, lo central es cuidar a los pacientes que serán operados, para garantizar que el tránsito por el área quirúrgica sea lo más cuidado posible. "Atravesar una cirugía no es fácil, el instrumentador es responsable del paciente desde el ingreso hasta el egreso del quirófano, pasando por cuestiones administrativas, de organización, de logística y del acto quirúrgico en sí mismo", resaltó Garcilazo, remarcando la importancia de su profesión dentro del ámbito sanitario.
En el país se puede acceder a la licenciatura en Instrumentación quirúrgica desde el 2005. Pero, según cuenta Garcilazo, el Estado Nacional y las Universidades Nacionales pusieron en agenda la profesión recién en 2010 gracias al impulso de la Asociación Nacional de Instrumentadoras. La primera Universidad Nacional que dictó la carrera fue la Arturo Jauretche, de Florencio Varela. Más tarde se sumaron la de José C. Paz y tras ella, la de Tres de Febrero y la de San Isidro.
Uno de los puntos sobresalientes de la reglamentación es que quienes que se desempeñan como licenciados serán incorporados a la carrera profesional hospitalaria, enmarcada en la Ley 10.471. "Eso permite que muchas compañeras que tienen el titulo técnico puedan acceder al grado, ya que a las licenciadas se nos brinda la posibilidad de pasar a la carrera profesional hospitalaria, lo que resulta una posibilidad ascendente dentro de nuestro espacio laboral", describe Garcilazo. "Esta decisión viene a ampliar un derecho a las que pertenecemos al segundo tramo de la profesión", explicó.
"Para nosotras, esto es entendido como un reconocimiento a lo que hacemos día a día. Estamos ampliando el horizonte, vamos a poder hacer carrera profesional como cualquier otro trabajador de la salud. Hasta el momento esto no era así y esto es un punto de inflexión" dijo.
Otra de las medidas que se tomaron a partir de la firma llevada a cabo en el Salón Dorado de la Gobernación provincial, fue crear la Comisión Permanente de Asesoramiento y Colaboración que estará conformada por representantes del Ministerio de Salud, la Asociación Argentina de Instrumentación y Universidades tanto nacionales como provinciales.
"Es sumamente valioso. La participación de las instituciones en la comisión es fundamental, porque va a asesorar al ministerio particularmente en temas netos y propios de la Instrumentación quirúrgica vinculados a las necesidades de cuidado y los procesos. Además, lo que la mesa viene a traer es ese ojo veedor en las instituciones educativas con respecto a la profesión. La intención de la mesa es crear un ámbito donde se pueda discutir y asesorar al Ministerio en los temas inherentes a nuestra profesión, algo que todavía no ocurre, y también permitir espacios académicos y de formación necesarios para el crecimiento y el desarrollo de la carrera" remarcó Garcilazo.
Los objetivos de la comisión se centrarán en asesorar acerca de la regulación del ejercicio de la instrumentación quirúrgica, la formación de grado y pregrado, la investigación y la creación de nuevos centros quirúrgicos. También deberán garantizar la calidad en la atención, organización y funcionamiento de los mismos. "Uno de los puntos que se desarrollarán es la formación de grado y pregrado, pensando en los planes de estudio y también en el trabajo de investigación de los temas inherentes al área. Una de las responsabilidades que esta reglamentación le otorga a las universidades es la posibilidad de emitir títulos de especialistas en el área de la Instrumentación quirúrgica", destacó la coordinadora de la licenciatura de la Universidad de José C. Paz
La cantidad de mujeres que desarrollan la función de la Instrumentación Quirúrgica es notable: en la provincia de Buenos Aires son 8.984 las y los instrumentadores quirúrgicos matriculados, de los cuales el 94% son mujeres. Pese a ello, Garcilazo remarcó que "con el correr del tiempo esos números van cambiando y se ve en las inscripciones a la carrera". En paralelo, el ministro Kreplak destacó el valor de las instrumentadoras ya que se desarrollan "en un ambiente históricamente machista".
"Esas situaciones ahora se están modificando, hay una tendencia de cambio" comenzó Garcilazo, refiriéndose a las palabras del ministro y agregó que "ya pensar un área quirúrgica es un acto violento en sí mismo. El paciente tiene una complicación y hay que intervenirlo pero más allá de eso, en los quirófanos antiguamente se manejaba una estructura muy verticalista, muy del patriarcado y del machismo. Antes los cirujanos y anestesiólogos eran varones. El tema es que ahora, con la feminización de la profesión, está habiendo muchas más mujeres".
En ese sentido, Garcilazo remarcó que "esta reglamentación y poder pasar a la carrera profesional hospitalaria nos hace dejar de estar en una posición asimétrica, nos pone de manera horizontal con el resto del equipo" debido a que ahora "tenemos los mismos derechos y las mismas obligaciones con las competencias de nuestra profesión. Nos iguala y es beneficioso. La salud tiene un componente machista pero lo estamos cambiando. Esas son decisiones políticas y ayudan a romper el modelo central porque empieza a existir una pluralidad que pone en discusión qué sistema de salud queremos".