En el Poder Judicial de Neuquén le tomaron juramento a Óreo, un perro de asistencia, que formará parte de un programa que acompaña a niñxs y adolescentes que declaran en las entrevistas en cámara Gesell, ya sea como víctimas o testigos en alguna investigación judicial.
El animal, que se integrará al programa “Perros de Asistencia Judicial”, protagonizó una extraña, pero auténtica ceremonia donde tuvo que asumir sus compromisos. La jura se realizó en el Salón de Usos Múltiples del gabinete pericial.
A través de un video que circuló en las redes sociales, puede observarse el momento en que una funcionaria judicial le toma juramento a Óreo, con el mismo protocolo que se utiliza para las personas.
“Can 'Óreo', ¿jura usted por la patria dedicarse fielmente y legalmente a dependencia judicial con destino al área infanto juvenil de psiquiatría forense?”, reza la mujer frente al animal.
Después de la pregunta de rigor, se hace un silencio en la sala al tiempo que la funcionaria y los presentes esperan la respuesta del perro que, por supuesto, nunca llega. Luego se escuchan los aplausos entusiasmados del público presente.
De acuerdo al portal oficial Noticias Jus Neuquén, Óreo es de la raza Labradoodle y fue donado especialmente para que integre el área del gabinete de psiquiatría y psicología forense del Poder Judicial neuquino.
Participaron de la especial y emotiva ceremonia la presidenta del Tribunal Superior de Justicia María Soledad Gennari, el vocal Germán Busamia y la defensora general Vanina Merlo. También estuvieron Claudia Valero, secretaria de Superintendencia; Laura Grindetti, asesora general adjunta de menores del Ministerio Público Tutelar de CABA; Dina Chávez, responsable del gabinete de psiquiatría y psicología forense; Carlos Agudo, adiestrador y referente en el convenio; y Patricia Medardi, propietaria del criadero que donó a Oreo; junto a otros magistrados, funcionarios y empleados del Poder Judicial.
Canes de asistencia
El programa “Perros de Asistencia Judicial” consiste en la presencia de canes entrenados, como un recurso terapéutico para los niños, niñas y adolescentes que asisten a las entrevistas en cámara Gesell, tanto por ser víctimas o testigos en alguna investigación judicial.
Se plantea como parte de un proceso “donde son niños, niñas y adolescentes son activamente escuchados y a modo de restaurar o dar comienzo al camino de recuperación, con estrategias tendientes a minimizar la revictimización institucional”.
Desde que se implementó el programa en junio de 2021 “se han evidenciado notables muestras de disminución de la ansiedad y el miedo, frente a la experiencia que implica tener que brindar un testimonio y exponer vulnerabilidades en el contexto judicial”, explicaron las autoridades.