Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, que se esmera en correrse cada vez más a la derecha, volvió dar una muestra su discurso extremista. Lo hizo a través de un mensaje de audio que envió a sus diputados. "Hoy la izquierda está acabada", dice la dirigente del Partido Popular, tras lo cual agregó: "Matadlos".
Se trató de una arenga para atacar a la oposición en el parlamento regional. El audio llegó a los celulares de sus 65 diputados, a los que envalentonó para remarcar en la sesión presuntos logros de su gestión, como el fin de las huelga de médicos (que puso en jaque al sistema de salud de la capital española hasta que se aumentaron los sueldos); o la ayuda a los afectados de una línea de subte, la 7B.
No solamente eso: también insistió en que se machacara con el cierre de la acción judicial contra su hermano, señalado por ser parte de una empresa contratista del Gobierno en la provisión de barbijos durante la pandemia. Ese hecho fue colocado en la arena pública por la dirección del PP hace un año. Resultado: la crisis se saldó con la salida de Pablo Casado, líder de los conservadores, y Díaz Ayuso quedó incólume. La Justicia archivó la causa.
“Anuncio de la 7B”, “Se acaba la huelga sanitaria”, “Lo de mi hermano queda en nada”, son varios de los consejos por audio, para rematar con un "Matadlos".
Dicho y hecho: los argumentos de los diputados populares en el parlamento madrileño fueron calcados del audio filtrado. “Quisieron linchar a la presidenta y a su hermano”, dijo un diputado del PP en la sesión a la oposición del PSOE y Unidas Podemos.
Díaz Ayuso es la estrella en alza de la derecha española. Hace dos años revalidó su cargo en una audaz jugada, cuando adelantó las elecciones y derrotó a Pablo Iglesias, de Unidas Podemos, quien tras ese resultado anunció su retiro de la política. La presidenta regional destaca por su retórica, en la que habla de "comunismo" para referirse a cualquier fuerza política que no sea la suya y coquetea con la extrema derecha de VOX. De hecho, ha llegado a fustigar al peronismo. Ahora hablar de "matar", aunque sea en sentido figurado.