Generalmente, hay dos maneras de entender los festivales musicales en esta época. La más común es aquella en la que el público pone el foco en los nombres conocidos: los iconos, las leyendas o las figuras del momento, que terminan acaparando las letras más grandes de la programación, los escenarios principales y los horarios centrales. Suelen presentarse a partir de la caída de la tarde, el instante de mayor afluencia en el predio, en un éxtasis masivo tan intenso como efímero.
Pero, a contramano de las llamadas cabezas de cartel o headliners, la otra forma de disfrutar de la experiencia festivalera es entregándose a ella o fluyendo con ella. Es cierto que hay que tener tiempo para hacerlo, pero vale la pena. Siempre sin condicionamientos y con buena disposición para la sorpresa, según las ganas del espectador y la oferta del evento. Al final de cuentas, son los artistas que terminan alimentando esta aventura musical.
A diferencia de otros festivales, Lollapalooza apela por el equilibrio de las fuerzas. No es muy experimental ni under, pero tampoco apunta hacia la obviedad del mainstream. El sello de garantía es su creador, Perry Farrell, amplio conocedor de sendos universos gracias a su travesía con su banda Jane's Addiction, punta de lanza de la alternatividad. Concepto que trasladó a la grilla.
Esta octava edición de la versión local de Lollapalooza no será la excepción, con un centenar de artistas que le darán vida entre este viernes y el domingo a los cinco escenarios erigidos en el Hipódromo de Palermo, entre los que hay bastantes propuestas notables para tantear. Una era Willow (quien prefiere no usar artísticamente el apellido de su padre, el actor Will Smith), pero el miércoles se bajó de su gira sudamericana. Segunda cancelación, tras la de Blink-182.
► Viernes 17: ¿quién te conoce, Drake?
El Lollapalooza ya arrancó y presentó, por ejemplo, a la actriz y cantante Suki Waterhouse (razón de ser de la visita de su pareja, Robert Pattinson, a Buenos Aires), cuyo más reciente single se llama To Love... Casi casi Tove Lo, el nombre de la cantante sueca de electropop que en un rato buscará chapa de novedad para descubrir en el Escenario Flow. Y hace un rato acaba de actuar otra delegada de la nueva música nórdica: la noruega Aurora Aksnes, con su pop con aroma a fiordo.
En español, el gran atractivo del arranque del Escenario Perry's fue Villano Antillano, raper no binarie que se volvió popular acá al protagonizar la BZRP Music Sessions 51. Además, dio inicio a un torrente que continúa ahora su paisana Young Miko y que luego levantará temperatura con Alvaro Diaz y Danny Ocean, antes del cierre de la DJ australiana Alison Wonderland, casi al mismo tiempo que los dreampoperos Cigarretes After Sex, que vienen de romperla el miércoles en su sideshow en el Teatro Vorterix.
Entre medio, por supuesto, el cierre main local con el tándem de Chano y Marilina Bertoldi, antes de Rosalía, Drake y la jodita tardía con Armin Van Buuren.
► Sábado 18: ¿se bajó Blink-182? ¿y cuál hay?
Si bien The 1975, Twenty One Pilots y Tame Impala acaparán la atención en el anochecer del sábado, la joda empezará desde temprano con Sassyggirl y Broke Carrey, y hasta habrá lugar para que Wallows tenga revancha en el Escenario Samsung, a las 16:45, tras su sideshow en el Teatro Vorterix. Para cuando la banda del actor Dylan Minette se suba a escena, la cantante colombiana Elsa y Elmar habrá recorrido los diferentes matices de su pop, esos que cautivaron a Juan Ingaramo para hacer juntos el cover de Fuego y pasión.
Después de ella, el Escenario Alternative recibirá a la dupla electrónica neoyorquina Sofi Tukker: si en su sideshow se limitaron a un DJ set, esta vez pelearán sus instrumentos. Y bjo el inclemente sol y envuelto en la pegajosa humedad, el Perry's recibirá a varios talentos, como el reggaetonero colombiano Ryan Castro, y seguidamente Rusowsky y Ralphie Choo, noveles sensaciones de la música urbana española.
Y luego vendrán Nora en Pure (el álter ego de la DJ sudafricana de música house Daniel Niederer, tan rubia como la papa) y, también a propósito del dance floor, el productor y DJ inglés Fred Again, puso a circular en la madrugada del viernes su nuevo single: Baby Again, todo un temazo firmado con sus colegas Fout Tet y Skrillex, con quien improvisó un sideshow el viernes a la medianoche en C Complejo Arte Media. También serán de la partida de este fiestón Anita B Queen y Ahadadream.
► Domingo 19: ¿Billie quién? ¿Lil Nas qué?
Amén de que los platos fuertes del domingo en el Escenario Flow serán María Becerra y Billie Eilish, con Lil Nas X y Skrillex haciendo fuerza desde el Samsung, el último día del festival estará bien variado y sustancioso. León Cordero, revelación argentina de la música urbana y el bedroom pop, inaugurará el Escenario Samsung, donde también estará Kali Uchis para presentar su nuevo disco.
Antes actuarán ahí el músico y vloguero Conan Grey, mientras que su doblemente colega español Rojuu estará antes en el Escenario Perry's, justo después del trapero Muerejoven. Pero el plato fuerte de ese amplificador sonoro no serán los DJs Claptone o Gordon City. Ellos más bien exorcizarán ese escenario, una vez que pase por ahí la controvertida rapera dominicana Tokischa, uno de los shows más esperados.
La ex de Madonna estará descargando su pesado flow al mismo tiempo que en el Escenario Alternative el sutil dúo francés Polo & Pan finalmente debutará en Buenos Aires (tanto se deseaba su visita que repetirá el martes en Niceto Club). Estos deudores del legado del french house, de la chanson y de Giorgio Moroder tocarán en medio de los indie Modest Mouse y de los traight edge Rise Agianst, a manera de recordatorio de que el eclecticismo hoy es lo que manda.