La fiscalía federal antimafia de Brasilia abrió una investigación contra el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022) y su esposa, Michelle Firmo, por el supuesto delito de peculado que se habría cometido con el contrabando de joyas y diamantes de la marca suiza Chopard, valuadas en 3,6 millones de dólares, que fueron regalo del Gobierno de Arabia Saudita en 2021 y traídas en la valija de un exministro del gabinete, informó hoy la prensa brasileña.
El escándalo del contrabando de joyas estaría demorando el regreso de Bolsonaro desde EE.UU, adonde está desde el 30 de diciembre con visa de turista. En teoría tiene previsto retornar el próximo 29 de marzo, cuando el presidente Luiz Inácio Lula da Silva esté de gira oficial por China.
Un fiscal antimafia
Según Folha de Sao Paulo, el fiscal Caio Vaez Días, integrante del Grupo de Actuación Especial de Lucha contra el Crimen Organizado, fue designado como el investigador de la denuncia de peculado contra el expresidente ultraderechista. Dias es uno de los investigadores del intento de golpe de Estado del 8 de enero perpetrado por miles de seguidores de Bolsonaro en Brasilia que pidieron la intervención del Ejército para derrocar a Lula.
El pedido de apertura de la investigación, aceptado por el Ministerio Público Federal de Brasilia, fue realizado por la diputada oficialista Luciene Cavalcante, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
El peculado es un delito que ocurre cuando un funcionario, en virtud del cargo que ocupa, desvía bienes públicos en beneficio propio o de terceros y tiene entre 2 y 12 años de prisión.
La denuncia del senador
La investigación de la fiscalía ocurre luego de que el senador Omar Aziz, del Partido Social Demócrata (PSD) anunciara que en la comisión de patrimonio de la cámara alta, se iniciará la investigación sobre si las joyas son parte de un supuesto soborno a raíz de la privatización de la refinería Landulpho Alves de Bahía, de la estatal Petrobras, adquirida por la mitad de su valor de mercado por el fondo Mubadala Capital, de la monarquía de Emiratos Arabes Unidos.
La denuncia de la diputada ante la fiscalía de Brasilia incluye al exministro de Minas y Energía Bento Albuquerque -recibió las joyas por parte de la monarquía saudita en octubre de 2021- y el ex titular del órgano fiscal y de aduanas, Julio Gomes, acusado de intentar presionar a sus subordinados a pedido del presidente Bolsonaro.
Bolsonaro, excapitán del Ejército, admitió ante CNN Brasil haber tomado para sí un regalo del Gobierno saudita a Brasil, un conjunto de reloj, gemelos y pulsera de oro de la marca suiza Chopard: por este caso el tribunal de cuentas obligó a devolver las joyas al patrimonio nacional en los próximos días.
Desembarco con joyas escondidas
En octubre de 2021 el entonces ministro Albuquerque, un almirante, retornó de un evento oficial en Riad con un asesor, un sargento, y desembarcó en el aeropuerto de Guarulhos, en San Pablo.
Allí, un agente aduanero pidió revisarle la mochila al sargento y allí adentro había, sin declarar oficialmente, un conjunto de joyas y diamantes de Chopard femenino valuado en 3,5 millones de dólares, que fue confiscado por carecer de documentación.
"Es para la primera dama", dijo Albuquerque al interceder ante el fiscal de aduanas, buscando presionarlo para liberar las joyas, según las cámaras de seguridad que captaron el sonido de la escena. Después se descubrió que ese sargento transportó un segundo conjunto de joyas en otra valija, también para Bolsonaro, quien se quiso quedar con todos esos regalos y no entregarlos a la presidencia de la República, que es lo que indica ala ley.
Bolsonaro intentó nueve veces recuperar las joyas valuadas en 3,5 millones de dólares y decomisadas, enviando a personas de confianza a destrabar el caso. Pero no pudieron, gracias a la acción anticontrabando de los agentes de la Receita Federal. La ex primera dama dijo que desconocía el caso, volcando la culpa del contrabando en el almirante Albuquerque.