Luego de un proceso de negociación que se extendió que se extendió por varios meses, más de 90 organizaciones gremiales de La Plata, Berisso y Ensenada llegaron a un acuerdo para sellar la unidad en la CGT Regional.
Tras ese paso, que se formalizará en un acto que tendrá lugar el próximo lunes por la tarde, el gobernador Axel Kicillof recibió este viernes a los delegados normalizadores que manifestaron su respaldo a la gestión gobierno.
La comitiva que visitó a Kicillof en La Plata estuvo integrada por Antonio Di Tomasso (UOM), Pedro Borghini (Sanidad), Héctor Nieves (UPCN), Nahuel Chandel (Petroleros), Darío Micheletti (Televisión) y Miguel Forte (Camioneros) representa a los 92 gremios que integran la CGT Regional La Plata, Berisso y Ensenada que sesionarán el lunes 20 en el Cámping del Sindicato de Obras Sanitarias, cuyo secretario general y uno de los promotores de la unidad, es Julio Castro.
La reunión fue celebrada por el gobierno provincial, desde donde consideraron “muy importante” el apoyo recibido por parte de los representantes del movimiento obrero de la capital provincial, que vuelve a recuperar su unidad después de 15 años.
Vale recordar que el movimiento obrero tiene una importante participación en la estructura del oficialismo provincial. Además del ministro Trabajo, Walter Correa, el movimiento obrero cuenta con siete bancas en la Legislatura provincial. Allí, desde la Cámara de Diputados se alistan Soledad Alonso (SECASFPI), Naldo Brunelli (UOM) y Natalia Sánchez Jáuregui (UATRE); mientras que Omar Plaini (SIVENDIA), María Reigada (CTA), Ana Devalle (ATE) y Naldo Brunelli (UOM) ocupan sus espacios en el Senado bonaerense.
Castro, Di Tomasso y Nieves se convertirán en los delegados generales, mientras que Micheletti, Borgini de ATSA y Chandel serán los delegados adjuntos. Se espera que del acto que oficializará el acuerdo participen representantes de la CGT en el orden nacional y un grupo de autoridades provinciales, algunas de las cuales estuvieron también en la reunión de la casa de Gobierno: además de Correa, el jefe de Asesores, Carlos Bianco, y el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak.
En el proceso de unidad cumplió un rol central Abel Furlán, que desde la Secretaría del Interior de la CGT, que desde su llegada al cargo comenzó un proceso de normalización en las diferentes regionales a lo largo del país. En ese trabajo también se destaca el papel de Horacio Otero, el hombre que recorre el país con el mandato de lograr la unidad que garantice la normalización en cada una de las regionales de la central nacional.