La iniciativa presentada por el diputado Oscar Martínez (FR-PJ) se enmarca en la necesidad de la utilización de la mayor cantidad de recursos posibles para enfrentar la ola de inseguridad y el recrudecimiento de los crímenes vinculados al narcotráfico que atraviesa a la provincia. A pesar de su comprobada efectividad, la provincia de Santa Fe cuenta al día de hoy sólo con cuatro canes preparados para investigaciones y pevención del delito.

El proyecto de Ley ingresado a la Cámara baja santafesina por Martínez expresa en sus fundamentos que su objetivo es “la formación de recursos caninos y humanos para que participen en la investigación judicial y en la detección y prevención del delito en la provincia de Santa Fe”. Y agrega que “el mismo se desarrollará en el seno de la Agencia de Investigación Criminal , y prevé la la utilización de Caninos Forenses y su contraparte humana que lleven adelante la Técnica Científica Odorología Forense de Identificación Humana sobre evidencia del lugar de los hechos y en rueda de reconocimiento de personas con asistencia de caninos. Asimismo se deberán formar los recursos caninos y humanos para la detección de Restos Humanos, Armas y Narcóticos en las medidas de prueba ordenada en el marco de la investigación. Además dentro de este mismo ámbito se deberá crear el Banco de Olor Humano a los fines de poder disponer de las distintas muestras para su posterior cotejo y utilización en las investigaciones cuando sea autorizado por la autoridad jurisdiccional”.

Consultado acerca de este Programa, el legislador expresó que “ante la gravísima situación que estamos viviendo en la provincia, tenemos la obligación como funcionarios públicos de utilizar la mayor cantidad de recursos disponibles para la prevención y lucha contra el delito. Está más que comprobada la eficacia que tienen estos animales para detectar narcóticos, armas, dinero y olores humanos, entre otras cosas. Realmente es muy preocupante que en la provincia de Santa Fe sólo contemos con cuatro canes preparados para esta tarea”.

“La Odorología Forense es una Técnica Científico Pericial Indiciaria aplicada a la identificación y comparación de indicios moleculares de huellas olorosas humanas que son de interés criminal lo que permite contar con información muy precisa acerca de la identidad del individuo del cual procede el indicio. Esta disciplina es una herramienta imprescindible en el proceso de identificación de huellas olorosas humanas e indicios biológicos de interés criminal. La Odorología Forense se aplica en casi todo el mundo, en la investigación de homicidios, secuestros extorsivos, terrorismo, narcotráfico, violaciones y robos calificados,entre otros delitos. La técnica permite el estudio del mecanismo de formación de la huella olorosa, captación y conservación para luego ser comparada con los diferentes sospechosos que surjan de la investigación. La huella olorosa humana es invisible a la percepción humana, estas pueden ser obtenidas de cualquier superficie, como ser cemento, asfalto, cerámica, madera, caucho, plástico, papel, agua, aunque estén contaminados por otros olores. El olor humano es único en cada persona lo cual el canino puede identificar por su alta capacidad de discriminación olfatoria, la Odorología Forense permite disponer de una técnica capaz de identificar sospechosos vinculados a un delito determinado y establecer su vínculo en la comparación odorífera por medio del uso de caninos especialmente entrenados con bases científicas. La identificación de olores humanos en delitos cometidos ha constituido focos de atención en lo que a la identificación molecular olorosa humana se refiere, podrá aportar a la práctica pericial una nueva herramienta que constituye a una mayor administración de justicia”, concluyó.