En un austero y conmovedor tributo, en medio de una fina lluvia, París homenajeó al exinternacional argentino de rugby Federico Martín Aramburu, cuyo asesinato en el bulevar Saint-Germain a manos de un militante de extrema derecha cumple hoy un año.
A pocos metros del crimen, en el 146 del legendario bulevar, familiares, amigos y antiguos colegas de Aramburu acudieron para recordar el primer aniversario del asesinato a tiros por parte de Loïk Le Priol (28 años), el presunto autor material del crimen detenido provisionalmente desde hace un año a la espera de ser juzgado.
"Siento el dolor por la falta de Fede y el trauma. A mi hijo lo mataron por la espalda", declaró a la prensa Cecilia Aramburu, quien encabezó el homenaje al antiguo jugador del San Isidro argentino, el Biarritz Olympique y el USAP Perpiñán, asesinado cuando tenía 42 años y era padre de tres hijos.
En el acto, además de la madre del antiguo internacional argentino (22 presencias en los Pumas), intervino el Embajador de Argentina en Francia, Leonardo Costantino, y autoridades locales, entre ellos el concejal de Deportes de París y exjugador de rugby, Pierre Rabadan.
El homenaje, en el que también estuvo presente la viuda de Aramburu, acabó con la reproducción de "Dale alegría a mi corazón", tema del cantante argentino Fito Páez.
En su discurso oficial, que tuvo que interrumpir por la emoción, Cecilia Aramburu apuntó el dedo a la intolerante ideología de la extrema derecha como el principal motivo del asesinato de su hijo y lamentó que, tanto Le Priol como uno de sus cómplices Romain Bouvier, actuasen con "total" libertad a pesar de estar fichados por la policía y uno de ellos cumplir régimen de condicional.
"Mi hijo fue víctima de una ejecución que nunca tenía que haber tenido lugar", constató.
Para el Embajador argentino Costantino, Aramburu, quien desde su retiro del rugby gestionaba en Biarritz una empresa turística, simbolizaba la amistad entre Argentina y Francia y pidió que "se haga justicia".
Asesinato de Federico Aramburu
En la madrugada del 18 al 19 de marzo, Aramburu, acompañado de su amigo y también exjugador neozelandés Shaun Hegarty, se enzarzó en una discusión en el restaurante Mabuillon con Le Priol, quien estaba acompañado de su pareja, y Bouvier.
Aramburu y Hegarty habrían salido en defensa de una tercera persona que pedía un cigarro y a la que los dos jóvenes extremistas habían tratado mal.
Después de comentarios xenófobos y racistas por parte de Le Priol y Bouvier -como denuncia el entorno de Aramburu-, la tensión aumentó y el argentino, que poseía también nacionalidad francesa, recibió disparos de los dos, aunque los mortales fueron por parte de Le Priol, integrante de movimientos de ultraderecha y antiguo militar.
Una de las dos placas descubiertas en el bulevar Saint-Germain denuncian el carácter ideológico del asesinato: "Que ninguna familia vuelva a sufrir la pérdida de un ser querido por la culpa de ideas y del odio que arraigan en fanatismos como el de la extrema derecha".