Ginecóloga de profesión, Alejandra Lorden sigue atendiendo pacientes todos los lunes. “Es mi cable a tierra”, dice la diputada radical, nacida en Saladillo, y ladera en la construcción territorial del titular de la UCR provincial, Maximiliano Abad. No duda demasiado a la hora de afirmar que el marplatense que preside el bloque de Juntos es el hombre que reúne el apoyo entre la mayoría los intendentes radicales, y casi la totalidad de los legisladores provinciales, además de conducir 121 de los 135 comités que se expanden en el territorio provincial.
La semana pasada, Gerardo Morales se lanzó oficialmente como candidato a Presidente de la Nación. Abad se acercó a saludar pero no se quedó en el acto. Apoyando abiertamente a Facundo Manes para ocupar el sillón de Rivadavia, Lorden celebra que el espacio opositor tenga más de un candidato. "Eso es un activo del partido, y no un problema", dice la legisladora a Buenos Aires/12 que también descarta que la situación pueda derivar en un final conflictivo, aunque siente que "falta más dialogo". “Jujuy es una provincia donde podríamos proyectar el país, por eso las aspiraciones de Gerardo Morales son válidas”, sostuvo.
La diputada saladillense consideró que la fase política ingresó en un "segundo tiempo" de cara a los tres meses que se avecinan, previos al cierre de listas. “Creo que faltan mesas de dialogo que rápidamente se van a dar en las próximas semanas, como seguramente se hará en el PRO y también el oficialismo”, analizó mirando la interna.
Observando su tarea como legisladora, con ese perfil dialoguista, Lorden entiende que las distintas fuerzas políticas deben alcanzar puntos mínimos de acuerdos que posibiliten el correcto funcionamiento de la Cámara de Diputados de la Provincia. Si bien comprende que será un año difícil a raíz de la agenda electoral, la diputada advierte que será necesario encontrar los puntos de acuerdo para que la Legislatura no quede paralizada. "Hay que sentarse a dialogar", repite.
Con ese espíritu, tomó la posta del discurso de apertura de sesiones de Axel Kicillof y consideró que, por ejemplo, se podría avanzar sobre el tratamiento de las autonomías municipales, conversando con los intendentes peronistas del conurbano y buscar, de mínima, una descentralización que empuje una mayor independencia para los gobiernos locales. “No sé si la autonomía municipal plena, porque no nos vamos a poner de acuerdo, pero si ensayar una descentralización administrativa para ver si la provincia se organiza mejor”, explicó.
“Mientras nosotros nos peleamos para ver quién es el candidato, quién se va y quién se queda, la que la pasa mal es la gente”, señaló Lorden, al tiempo que narró las conversaciones que tuvo con productores rurales que padecen los efectos de una sequía histórica que llevó a dictaminar la emergencia agropecuaria en 64 municipios. En base a ese acercamiento, afirmó comprender las razones por las que no se pueden eliminar las retenciones, pero aseguró que hay que trabajar de forma urgente de cara al financiamiento necesario para la próxima cosecha.
Observando el horizonte legislativo, su agenda de proyectos está focalizada, entre otras cosas, en alcanzar la Ley Integral para los Accidentes Cerebrovasculares, que ya cuenta con media sanción. “No hay una red que ataje esta situación, y en estos casos los segundos o minutos son determinantes para vivir o tener secuelas”, dijo en diálogo con este medio.
La modalidad de trabajo que apunte a los acuerdos es un eje que prima en el discurso de Alejandra Lorden. En ese sentido, lamentó lo que sucedió con la Ley 15.008, conocida como la Ley BAPRO, recientemente suspendida por la Corte Suprema bonaerense. “Hubiera hablado de una madurez política de todos si lo solucionábamos”, afirmó. La Justicia había emplazado a la Legislatura para que la norma aprobada durante la gestión de María Eugenia Vidal fuera modificada a partir de los problemas legales que generaba el perjuicio ocasionado para los trabajadores del banco. El oficialismo presentó un proyecto, se introdujeron algunos cambios propuestos por la oposición que, a último momento, decidió no apoyar la normativa y trabó la discusión en la Cámara. Pese a eso, Lorden consideró que “siempre es mejor que lo que puso la política lo arregle la política”, y agregó que "con la amargura de lo que les tocó vivir a los empleados y empleadas del Banco Provincia, deberían estar enojados con todos, sin distinción”.
Edesur y la inflación
“La intervención de EDESUR es una respuesta parcial pero positiva al problema de servicios esenciales que esta padeciendo la gente”. A partir de esa lectura, Lorden hace referencia a la necesidad de avanzar sobre las soluciones para el problema de los cortes de luz que dejaron a más de 110 mil usuarios sin energía en medio de una ola de calor sin precedentes.
"Otra vez se habla de qué hacer con EDESUR, y lo que yo haría es sentarme con quien tiene que proveer la energía, aclarar la situación, ver el problema y analizar si tienen capacidad de solucionarlo", dijo la legilsadora y agregó: "Si no están en condiciones de hacerlo y no pueden cumplir con lo que está acordado, habrá que cambiar la concesión sin, de lo contrario se está perjudicando a la gente”. Aunque también dejó sentadas sus dudas respecto a lo conveniente de avanzar con la medida "en este momento".
Atenta a la situación económica del país, Lorden también manifiestó su preocupación respecto a la escalada inflacionaria y su impacto en los salarios. En ese campo de análisis, criticó a Massa por no llegar a cumplir con "los objetivos que él mismo estableció" cuando asumió la cartera económica a nivel nacional.
“Los gobiernos no pueden subestimar problemas como la inflación, porque se trata de un tema complejo que nadie puede solucionar en un año”, aseguró Lorden, a la vez consideró que la Argentina necesita establecer un proyecto que vaya por encima de quién gobierne y que mantenga los lineamientos que eviten la escalada inflacionaria más allá de los factores coyunturales. En ese sentido, rememoró la gestión de Cambiemos entre el 2015 y el 2019 y reconoció que “los primeros dos años en la Provincia fueron buenos, pero después de 2017 empezamos a trabarnos con la macroeconomía”.