“Tan Candonga convive con mis otras expresiones musicales desde el mismo lugar, es decir: el mismo amor, el mismo corazón, la misma sangre”, cuenta Black Rodríguez Méndez. El cantor, percusionista y actor, conocido principalmente por su rol como frontman de la Delio Valdez, presentará este jueves a las 21 en el salón Marabú (Maipú 365) un repertorio tanguero de raíz afro. No es la primera vez que Black se mete con el tango: tiene un disco grabado con el Cuarteto La Púa y numerosas participaciones como invitado en grupos de distintos registros del palo. Pero esta vez unirá su tambor a las guitarras de Juan Martín Scalerandi y Pablo Juárez Levar, “Las Guitarras del Sur”, para explorar la herencia negra del tango.
El proyecto, cuenta, retoma las influencias de Alberto Castillo y Romeo Gavioli, “que incluyeron en sus expresiones tangueras el toque del tambor, la alegría y también el sufrimiento de los afrodescendientes”. El plan, anticipa, es que este show sea el inicio de un camino de profundización por esta senda que antes emprendieron otros, como Sebastián Piana o Juan Carlos Cáceres. “De Castillo y Gaviole intentamos incorporar el aspecto popular de los candombes, que tiene la música afrodescendiente, más allá de algunos temas al repertorio”, señala. “La profundización a futuro es lograr esa libertad de poder mixturar el tango, la milonga, con aspectos afrodescendientes como los tambores, la manera de pulsar, de interpretar, la cadencia y acentuación de la milonga y el tango. Profundizar en sus libertades y campo creativo”, plantea.
Con el horizonte del carnaval de antaño, la presentación de Black y equipo propone “tangos guitarreros, candombes y milongas repiqueteadas, nuevas versiones de clásicos y repertorio bailable -con o sin abrazo- recorriendo el Río de la Plata en una barcaza de cultura afro-tanguera”.
“El proyecto surgió a medida que fui avanzando con mi programa de radio La hora negra (Nacional Folklórica, jueves 2 am), investigando y conociendo el aporte afro a la cultura americana, tan silenciado e ignorado particularmente en nuestro país”, revela. “El tango y la milonga no son ajenos a ese silenciamiento, y a partir de ahí me dieron ganas de sumarle a los sonidos tangueros y milongueros el toque del tambor, instrumento con el cual me inicié en el camino musical”.
Los seguidores de la Delio no tienen nada que temer. Black no piensa abandonar la cumbia, e incluso cree que ambos géneros se retroalimentan dentro de él. “Tanto el tango como la cumbia son y fueron expresiones absolutamente populares y mi formación musical o artística es absolutamente popular. Yo me muevo por lo que me habita, así que seguramente hay algo del tango en cada cumbia que canto en la Delio y algo de cumbia en cada tango que cante en el Marabú”.