Ya son parte del paisaje urbano y de la peatonal, y desde hace un tiempo visitan escenarios; como corresponde, salieron a buscar al público y ahora es el público el que los sigue. Este sábado a las 21, Sala Lavardén (Sarmiento y Mendoza) recibe a Banda Verde y con nuevo repertorio: “Hits de los 80”. “Estamos muy felices con lo que de alguna manera hemos construido; creo que intervenir un espacio público como la peatonal y durante tanto tiempo ha hecho que conformemos un público muy heterogéneo. Todo eso nos permitió desarrollar nuestra música y acceder a un teatro, algo que está sucediendo desde hace tres años. Estamos ensayando y armando el nuevo repertorio, trabajando con muchas ganas y alegría; cuando uno hace cosas nuevas, el interés se reaviva y eso es vital”, refiere Bruno Ferrúa a Rosario/12.
Desde 2009, el proyecto musical que fundaron Ferrúa y el bajista Juan José “el Negro” Flores –fallecido en 2021, recordado con profundo afecto por el ambiente local– sumó músicos y canciones hasta conformar la nómina actual con Ferrúa (batería), Paula Soka (voz), Sebastián Teglia (guitarra), Luciano Duri (teclados) y Gabriel Coronel (bajo). Los temas elegidos podrán, con seguridad, ser reconocidos por el público que camina la ciudad, pero lo que ya les acompaña y de manera distintiva –algo que ese mismo peatón hoy también distingue– es el logro de un sonido propio. “Se fue dando a lo largo de tantos años, haciendo covers, pero cualquiera de los cinco integrantes que somos siempre hacemos música desde nosotros, tenemos una impronta propia a la hora de recrear las canciones. También, al momento de hacer una elección, pensamos en lo que podemos dar, llegar a cantar y hacer propio, siempre desde un lugar que nos guste. Otra cuestión es la posibilidad de ir probando las versiones en las calles, porque es un termómetro de cómo reacciona la gente. Hay temas que probamos y funcionaron, y otros que no, que no nos quedan cómodos y los cambiamos. Al tocar tantas veces en eventos, en la peatonal y otros lugares, nuestra música se va asentando y ajustando”, prosigue Ferrúa.
-Y ahora toca el turno a los ’80, ¿qué canciones eligieron?
-Estamos haciendo muchos temas de Queen, una banda sublime para todos nosotros. Pero hubo algo fortuito, y tuvo que ver con un evento para el que nos contrataron, era una persona fanática de Queen y nos pidió un repertorio exclusivo de esa banda. Lo armamos y nos dimos cuenta de que a la Negra Soka le quedaba muy bien cantar la música de Freddie Mercury, así que nos pusimos a desarrollar más ese repertorio, en base a hits de los ’80 que fueran de nuestro gusto. Por otro lado, si bien siempre cantamos música en inglés, ahora empezamos también a agregar temas de nuestro rock nacional. El repertorio se ensanchó, con Queen como un eje troncal para la banda. Habrá temas de Virus, Charly, Beatles, Travelling Wilburys, Jeff lynne, A-Ha, entre mucho más, también con invitados sorpresa.
-Al volver a las calles tras el encierro, ¿cómo fue el reencuentro con la gente?
-Cuando volvimos a tocar en la peatonal, el deseo de la gente de escuchar música en vivo fue muy impactante, mágico, con niños disfrutando y bailando, gente emocionada. Intervenir un espacio público genera sorpresa en la gente; mientras hacen sus actividades diarias, de pronto se encuentran a una banda de la magnitud de Banda Verde, con buen sonido, vestuario, una propuesta musical fuerte. Es algo que genera distintas emociones y eso lo percibimos; también es un ida y vuelta, que nos nutre. Hay gente que nos dice “me alegraron la mañana”, “me cambiaron el día”, así como el hecho de ver gente mayor, adolescentes o niños, bailando. Todo eso genera algo muy hermoso.
-Una tarea que prosigue desde el legado de Juan José Flores.
-Él era mi hermano y un gran amigo. Transitamos mucho tiempo trabajando juntos, produciendo la banda. Más allá de que él era un excelente músico de Rosario, conocido en todos lados, un referente del rock y de muchos géneros, un tremendo bajista con un sonido único, era también un tremendo padre y amigo, un loco muy inteligente, muy cauto para hablar y emitir un pensamiento. Nos enseñó muchísimo a quienes integramos hoy Banda Verde. Hace poco fue su cumpleaños y lo estuvimos pensando y soñando, dejó un hueco que va a ser imposible de llenar pero también un recuerdo muy hermoso. Creo que su impronta está, es un sello. Toda vez que queremos hacer algo nuevo, pensamos en qué hubiera hecho el Negro. Es una pérdida irreparable pero se aprende a vivir con esa falta. La vida continúa y hay que seguir adelante.