Al menos 13 civiles murieron, dos resultaron heridos y otros dos fueron detenidos este jueves durante un operativo policial en una favela de Sao Gonçalo, en la región metropolitana de Río de Janeiro, donde estaba oculto el jefe narco del estado amazónico de Pará, uno de los fallecidos durante el procedimiento.
"Hay 13 muertos, dos individuos presos y una gran cantidad de armas incautadas", informó en una rueda de prensa Fabrício Oliveira, de la Coordinación de Recursos Especiales de la Polícia Civil de Río de Janeiro.
La operación se desarrolló en el Complejo de Salgueiro, ubicado en Sao Goncalo, una ciudad en la periferia pobre de Río, con casi un millón de habitantes.
"Fue una operación de mucha violencia de parte de ellos", dijo Oliveira, en referencia a quienes describió como miembros de "una banda que utiliza tácticas militares y de guerrilla".
"Todos nuestros blindados y aeronaves recibieron varios tiros de fusil", detalló en la conferencia de prensa, donde se presentó más de una decena de armas incautadas y drogas.
En medio del intenso tiroteo, dos mujeres que viven en el lugar resultaron heridas pero están "fuera de peligro", añadió el vocero policial.
La acción conjunta de agentes de las policías civil y militar de Río tuvo por objetivo "la captura de integrantes del Comando Vermelho del estado de Pará que se refugiaban en la localidad", según un comunicado de la fuerza emitido horas antes.
El Comando Vermelho, surgido en Río de Janeiro, es una de las mayores organizaciones criminales de Brasil, dedicada al narcotráfico.
Imágenes de televisión mostraron camiones blindados de la policía militar transitando entre las viviendas de la comunidad. Al caer la tarde, las fuerzas del orden continuaban desplegadas en el ingreso de la favela.
Entre los muertos está "el principal líder de la mayor organización criminal que operaba en Pará", informó el gobernador de este estado norteño, Helder Barbalho, en Twitter.
"Leonardo Araújo, conocido como 'L41', prófugo de la justicia, murió en un enfrentamiento con agentes de seguridad", señaló.
El hombre estaba prófugo de la justicia desde 2019 por estar acusado de comandar ataques en la ciudad de Belém, estado de Pará, que mataron a más de 40 policías.
La acción también apuntó a otros líderes de bandas criminales "involucrados en ataques recientes a comunidades de la zona oeste de Río", donde varios vehículos fueron incendiados el miércoles.
La operación contó con la participación de la tropa de elite Bope, cinco blindados y dos helicópteros y 80 hombres, entre ellos del batallón de inteligencia que se habían infiltrado en la favela.
"Confiamos en nuestras policías, que operan en un escenario con desafíos que no se encuentran en otro lugar del mundo; no vamos a permitir que Río sea usado como escondite de bandidos de otros estados", dijo el gobernador de Río de Janeiro, Claudio Castro, aliado del expresidente Jair Bolsonaro, en las redes sociales.
En 2021 murieron 1.356 personas a manos de las fuerzas policiales en el estado de Río de Janeiro-las que más matan y más mueren en enfrentamientos en Brasil-, según el proyecto Monitor da Violencia.