Darío Lopérfido se convirtió en los últimos años en un emblema del negacionismo y de la relativización del terrorismo de Estado. El ex funcionario de Fernando de la Rúa había provocado en 2016 al decir que los desaparecidos no eran 30 mil sino 9 mil y jugó a ser un exponente de derecha dura. Debió dejar la dirección del Teatro Colón y el ministerio de Cultura de la ciudad de Buenos Aires.
En las últimas horas, y a propósito del aniversario del golpe de 1976, Lopérfido volvió a insistir con su mirada sobre los 70. Lo hizo a través de un artículo en la revista Newsweek, en el que no se mete con la cifra de víctimas del terrorismo de Estado, aunque retoma algunos de sus tópicos de antaño, como la teoría de los dos demonios.
"Debería ser un día donde todos recordaran con respeto esa parte trágica de la historia. Sin embargo, no lo es porque un sector de la política se apropio de manera sectaria de la fecha para usarlo para su conveniencia", dice el exintegrante del Grupo Sushi.
"Los muertos que están invisibilizados fueron asesinados por organizaciones peronistas y durante un gobierno peronista. Recordemos: Montoneros y la Triple A eran organizaciones peronistas", dice en un pasaje, y añade que "el kirchnerismo habla de memoria y desprecia a la historia porque la historia le muestra datos que no le convienen y porque a la memoria se la robaron para manipularla".
Cierra afirmando que "una de los temas que deberá enfrentar el próximo gobierno es corregir todas las distorsiones históricas que instaló el adoctrinamiento de este populismo nefasto".
Lopérfido tuvo un recordado cruce con el escritor Martín Kohan en LN+, en marzo de 2017, un año después de sus declaraciones. Al momento del cruce televisivo, se discutía el 2x1 para condenados por delitos de lesa humanidad, dispuesto por la Corte Suprema de Justicia, un fallo que, después de una gigantesca movilización, se retrotrajo.
En momentos en que el negacionismo ha vuelto a tener espacio, es bueno recordar las palabras de Kohan esa noche. "La cifra de 30 mil es abierta, es una interpelación al Estado, es una exigencia de respuesta", afirmó, al tiempo que remarcó el "carácter singular" de lo ocurrido con la tragedia de la dictadura.
"No tenemos muertos, tenemos desaparecidos, porque la represión fue clandestina, porque no hubo cuerpos, porque se siguen buscando los cuerpos, porque se siguen buscando los niños apropiados", se explayó el autor de Ciencias morales. "La cifra está abierta por eso".
"No estamos en la disputa de cifras bajo comprobación. Porque si el Estado reprimió de manera clandestina e ilegal, y los cuerpos los sustrajo y la información no la dio, la cifra abierta no es solamente que no sabemos. No es que inventamos 30 mil", cerró.