La prevalencia de una única empresa privada en el negocio de la recolección de residuos especiales activó la protesta de entidades empresarias e industriales y, en consecuencia, hizo que el asunto prenda en el Concejo hasta alumbrar un proyecto de ordenanza que apunta a intervenir ese mercado con la mano estatal: la empresa municipal SUMAR.
El reclamo viene de arrastre, puede decirse que tras la salida de pandemia comerciantes del rubro gastronómico e industrias acumularon quejas en sus cámaras corporativas por aumentos exorbitantes que registra el servicio de recolección diferencial de residuos. Del negocio participan cinco empresas habilitadas por Municipalidad, pero hay una de ellas –Clean City– que acapara el 80% del mercado y con esa posición dominante incrementó su tarifa en 300% solo durante 2022.
La situación llegó días atrás hasta la Secretaría de Comercio de la Nación, de mano de la Asociación Civil Empresaria Hotelero Gastronómica y Afines Rosario (Aehgar), que denunció la posición dominante que ejerce Clean City, en base a la cartelización del negocio.
"Siguen aumentando el servicio y hacen caso omiso a cualquier tipo de negociación o acuerdo. Esto preocupa a unos cuantos en el sector, y vemos que se aprovechan de un marco normativo endeble que no le pone techo a la tarifa. Por eso pueden hacer lo que quieran", reprochó el comerciante Alejandro Pastore, de Aehgar.
Pastore, también referente en el grupo gastronómico Paseo Pellegrini, reveló que de buenas a primeras la compañía "se le ocurrió cobrar cuatro veces más por su servicio y ahí fue donde se rompió la relación”.
El malestar tuvo repercusión en el Palacio Vasallo, y fue en el bloque Ciudad Futura donde primero recogieron el guante. "Desde el año pasado venimos acompañando a estos sectores de la economía local que se ven perjudicados por el claro abuso de posición dominante de esta empresa. Intentamos generar instancias de conciliación, diseños normativos para regular mínimamente este mercado, pero lamentablemente la Municipalidad sigue demostrando una indiferencia absoluta con este tema", observó el concejal Pedro Salinas.
En este sentido, dio a conocer una iniciativa que propone al Ejecutivo municipal implementar en la empresa SUMAR, a cargo de la recolección pública de residuos, una extensión del servicio para disputarle mercado a Clean City.
"Eso sanearía el negocio y protegería a los comerciantes locales si el Ejecutivo impone una participación en este mercado que pueda generar una estructura de precios testigo. Planificado con seriedad y a mediano plazo, este proyecto puede ser inclusive muy beneficioso para las arcas locales, y aminorar la dependencia que el municipio tiene respecto de las empresas que prestan este servicio”, convino Salinas.