Guatemala arrancó la campaña electoral entre críticas por la participación de la hija del exdictador Efraín Ríos Montt, Zury Ríos, como aspirante a la presidencia y denuncias por la exclusión de la candidata indígena Thelma Cabrera. La lideresa indígena Mam era una de las favoritas para llegar a la segunda vuelta electoral. En 2019 quedó en cuarto lugar con cerca de medio millón de votos.
La campaña electoral comenzó este lunes con 23 binomios presidenciales y 28 partidos políticos compitiendo por los diferentes cargos públicos. La población elegirá al presidente para el período 2024-2028, quien reemplazará al mandatario saliente Alejandro Giammattei. Además de 160 diputados, 20 legisladores del Parlamento Centroamericano y 340 alcaldías municipales.
Los comicios serán el 25 de junio. En caso de que ninguno de los candidatos obtenga 50% más uno de los votos, los dos primeros irán al balotaje en agosto.
Denuncias por las impugnaciones del tribunal electoral
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala anunció esta semana el cierre de las listas de inscripción para los comicios de este año. La noticia fue rechazada por manifestantes que denunciaron la exclusión de los candidatos presidenciales por el Movimiento por la Liberación de los Pueblos (MLP) integrado por la candidata indígena Mam, Thelma Cabrera y su candidato a vice Jordán Rodas, exprocurador de Derechos Humanos (2017-2022).
El TSE argumentó que su decisión estaba basada en supuestas denuncias penales contra Rodas. El exprocurador de derechos humanos rechazó la decisión del tribunal electoral y dijo que con la exclusión del Movimiento por la Liberación de los Pueblos “no habrían elecciones libres” en Guatemala.
Para la ONG Guatemala Verifica, el tribunal electoral busca “eliminar a los partidos y candidatos más fuertes, allanando el camino de quienes supuestamente aparecen finalistas en las encuestas”.
Según sondeos, las candidatas que lideran la intención de voto son la aspirante conservadora Zury Ríos, hija del exdictador Ríos Montt y Sandra Torres, exprimera dama (2008-2011), quien perdió en segunda vuelta en los comicios de 2015 y 2019.
Las dos candidatas centran sus promesas de campaña en reducir la violencia, mejorar la educación y salud y combatir la pobreza que afecta al 59% de los 17 millones de habitantes.
La hija del exdictador Ríos Montt
La semana pasada una marcha de activistas del Frente de Resistencia Contra el Fraude Electoral y la dictadura denunció la candidatura de la hija del exdictador Ríos Montt por ser familiar de un golpista.
El 23 de marzo de 1982 Ríos Montt derrocó al general Lucas García (1978-1982) y se autoproclamó presidente. Para ese momento Guatemala ya tenía más de 20 años de guerra civil (1960-1996). El conflicto armado dejó 200.000 muertos o desaparecidos, el 93% bajo responsabilidad de las fuerzas estatales, según un informe de la ONU.
Durante un año Ríos Montt instaló una feroz dictadura. Muchos años después, él y sus altos mandos militares fueron acusados de genocidio y tortura sistemática.
En 2013 Ríos Montt fue condenado a 80 años de cárcel por las masacres en 15 comunidades indígenas ixiles: 1.771 personas fueron asesinadas, incluyendo mujeres y niños.
Sin embargo, poco después la sentencia fue anulada por supuestos “errores procesales”. La justicia ordenó un nuevo juicio que no se pudo llevar a cabo por la muerte en 2018 de Ríos Montt, de 91 años.