Tres meses después de la primera balacera al edificio del grupo Televisión Litoral (TVL) en la ciudad de Rosario, la Justicia provincial ordenó 22 allanamientos que incluyeron al penal federal de Ezeiza. A partir del operativo, trascendió que el detenido en Ezeiza Nicolás "Pupito" Avalle está bajo sospecha de ordenar varios ataques y dos homicidios desde su celda. Además hubo otros 21 operativos en Rosario y Villa Gobernador Gálvez.
“Pupito” Avalle integraría, según investigaciones federales y provinciales, una célula de Los Monos junto con Leandro “Pollo” Vinardi. También hubo requisas en Complejos Penitenciarios como el Instituto de Seguridad y Resocialización de Rawson (Chubut), en el Instituto Correccional de Coronda y en la Unidad Penitenciaria N° 11 de Piñero, donde se incautó documentación de interés para la causa y celulares.
Los operativos fueron llevados adelante por la brigada de Balaceras y Extorsiones de la Agencia de Investigación Criminal, por orden de los fiscales de la unidad de Balaceras Valeria Haurigot, Franco Carbone y Federico Rébola, y los fiscales de Homicidios Dolosos Alejandro Ferlazzo y Patricio Saldutti.
"Pupito" y un secuestro
“Pupito” está preso por una investigación, tras un secuestro extorsivo cometido en julio de 2021 al hijo de un empresario de Arroyo Seco, quien fue atacado mientras se dirigía a comprar marihuana a un búnker de Villa Gobernador Gálvez.
Hasta esa causa, Avalle era un eslabón inferior en la cadena de mando de “Pollo” Vinardi. Pero los fiscales provinciales detectaron que, al ser trasladado a Ezeiza junto a su presunto jefe, escaló en el nivel de planificación de balaceras y crímenes para Los Monos. Por teléfonos que fueron incautados en requisas en Ezeiza –en el marco de una investigación del Ministerio Público de la Acusación contra Julio Rodríguez Granthon, condenado por narcotráfico– se llegó a un celular que usaba Avalle. En ese dispositivo, “Pupito” dejó conversaciones incriminatorias.
Balazos contra la TV
De acuerdo a los primeros indicios que detectaron los fiscales, Avalle habría planificado el ataque a tiros contra Televisión Litoral del 12 de diciembre pasado, hecho por el que hay varios imputados, entre ellos, Juan José Villazón, integrante de la banda narco “Los Salteños” del asentamiento Los Pumitas de barrio Empalme Graneros, donde fue asesinado a tiros Máximo Iván Jerez, de 12 años.
Pero el teléfono de "Pupito" también arrojó conversaciones denotando que el 3 de diciembre del año pasado, habría contratado a un sicario para matar a Miguel Ángel Rouilin, un changarín de 46 años que fue acribillado ese mismo día en la calle Los Ángeles al 3600, zona del barrio Puente Gallego.
Según la actividad de su propio teléfono, Avalle reclutó “mano de obra” para mandar a balear un búnker de Pasaje Piceda al 3600, en Villa Manuelita. Sin embargo, ese ataque terminó con el asesinato por un tiro en el cuello de Ricardo Américo Carrizo, un vecino de 60 años que estaba tomando mate en la puerta de su casa. Para ese homicidio, se sospecha que los gatilleros usaron el Volkswagen Up que también se utilizó en el atentado contra Televisión Litoral.
Ataque a Los Picudos
De acuerdo a las conversaciones que fueron analizadas en el celular de “Pupito”, también sobresale que encargó balaceras a “Los Picudos”, una banda de sicarios adolescentes acusada de acribillar a tiros durante un procedimiento, al policía Gabriel Sanabria, quien después de varios meses recibió el alta.
Uno de los allanamientos en la jornada llamó la atención. No fue dirigido a personas sospechadas por delitos violentos, sino a un "cuevero" en el centro de Rosario, sospechado de venderle dólares blue a Avalle y Los Monos. Sin embargo, no hay orden de detención para el financista.
La celda de Avalle fue requisada por segunda vez este mes. El 13 de marzo el reo fue allanado en ese penal junto con Leandro “Pollo” Vinardi y Damián “Toro” Escobar –todos cabecillas de Los Monos– en el marco de la investigación por el secuestro y homicidio de Lorenzo “Jimi” Altamirano, ocurrido el 1° de febrero pasado.