En la tarde del martes, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof encabezó junto con el ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez una reunión laboral con distintos representantes de las entidades rurales bonaerenses. La mesa de trabajo tenía un objetivo claro: la prórroga de la declaración de emergencia y desastre agropecuario, por lo menos hasta octubre.
En un principio, la medida estaba ideada para finalizar el 31 de marzo, pero la tristemente célebre sequía, la más grande de la cual se tenga registro en la Provincia de Buenos Aires a causa del fenómeno meteorológico llamado “La Niña”, obligó a un cambio de planes que no sólo se basa en la extensión de la medida, sino en una batería de acciones que buscan disminuir un poco las pérdidas que afrontará el sector en los próximos meses.
“Estamos ante una sequía que afecta transversalmente a toda la actividad agropecuaria pero que necesita medidas específicas que se adecúen a las necesidades de cada sector”, aseveró el gobernador al respecto.
En tanto, el titular de la cartera del agro provincial señaló: "Trabajamos en una Provincia atenta a las necesidades de las productoras y productores bonaerenses, y que en diálogo constante con todos los actores del sector, sigue implementando acciones concretas ante la continuidad de la situación de sequía".
Específicamente sobre las medidas tomadas en la reunión el ministro explicó que “en función del diálogo con el sector y del análisis de las perspectivas del sector, se decidió prorrogar la situación de emergencia en los distritos afectados y avanzar con una línea de financiamiento específica para pasturas, tanto de ganadería como de tambos, con tasa bonificada”
Para Kicillof este tipo de medidas “están destinadas a apuntalar a la Provincia productiva, en lo que define como “un contexto de difícil situación económica y financiera mundial y de una extraordinaria sequía que afecta al Agro”.
El escenario de la reunión fue la Casa de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. en que además de funcionarios provinciales participaron autoridades de Mujeres Rurales Argentinas, Agricultura Familiar, Federación de Productores de la Provincia de Buenos Aires (FEBAPRI), la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (CONINAGRO), Sociedad Rural Argentina, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), la Federación Agraria, la Federación de Cooperativas Federadas (FECOFE) y la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE).
Además, el ex ministro de economía de Cristina Kirchner subrayó la importancia de un “monitoreo permanente”. Y agregó: "Esta medida nos va a permitir ir adecuando las políticas de acuerdo a cómo evolucione la situación durante los próximos meses”.
Rodríguez además agregó que “se planteó una línea de trabajo vinculada a aquellos productores de pequeña y mediana escala, que arriendan predios para poder producir, con el objeto de equiparar los beneficios respecto de los propietarios”.
Una extensión necesaria
La declaración de Emergencia comenzó en noviembre pasado y fue pensada hasta fines del 2022, pero los fenómenos climatológicos obligaron a dos extensiones: primero hasta fin de este mes y ahora hasta octubre.
En este lapso de tiempo se ejecutaron prórrogas y exenciones en el pago del Impuesto Inmobiliario Rural. Además, el Banco Provincia creó una línea de crédito por Emergencia por Sequía y el Financiamiento para Afectados por Fenómenos Naturales que intenta solventar los costos de reparación de los daños materiales en inmuebles y vehículos.
En tanto, el Ministerio de Desarrollo Agrario dispuso aportes no reintegrables para la recomposición de infraestructura, la adquisición de insumos y la reposición de animales; y líneas de financiamiento con tasas especiales para facilitar el reinicio del ciclo productivo.