La Guardia Revolucionaria de Irán acusó este viernes a Israel por la muerte de uno de sus oficiales en un bombardeo en Siria y prometió una “fuerte respuesta". El “consejero militar Milad Heidari murió este viernes en las afueras de Damasco" en un “criminal ataque aéreo” del “régimen sionista”, informó la Guardia Revolucionaria en un comunicado recogido por medios iraníes.
“El criminal y falso régimen sionista recibirá sin duda una fuerte respuesta por este crimen”, agregó el cuerpo militar de élite. La muerte del “asesor militar” iraní ocurrió en medio de una escalada en la última semana en los choques entre EE.UU. y las milicias proiraníes en Siria. Además, Israel ha bombardeado con misiles en los dos últimos días, las afueras de Damasco, según denunció el Gobierno de Siria.
Un oficial de alto rango
"Milad Heidari, uno de los oficiales y consejeros militares de los Guardianes en Siria, cayó mártir al amanecer de este viernes, en el ataque criminal del régimen sionista contra los suburbios de Damasco", afirmó la agencia iraní Sepah News.
"Sin duda, el régimen sionista recibirá una respuesta por este crimen", advirtió la agencia de los Guardianes en su sitio, denunciando "el silencio de las asambleas internacionales" ante las "agresiones" israelíes en Siria. Principal aliado regional de Siria, Irán apoya al régimen de Bashar Al Asad desde el estallido de la guerra civil en 2011, incluso mediante el despliegue de asesores militares sobre el terreno.
El Estado judío ataca con cierta frecuencia objetivos en la vecina Siria, donde considera una amenaza para su seguridad la presencia de grupos armados libaneses e iraníes aliados del presidente sirio, Bachar al Asad. La presencia militar iraní preocupa especialmente a EEUU y a Israel, que ha bombardeado en varias ocasiones objetivos iraníes en el país árabe.
Una guerra soterrada
Al mismo tiempo, Irán e Israel mantienen una guerra encubierta que incluye ciberataques, supuestos asesinatos a científicos nucleares iraníes y sabotajes a barcos, aunque ninguno de los dos países suele reconocer públicamente sus acciones. Israel considera a la República islámica como su principal enemigo y ataca desde hace años, posiciones militares iraníes o de milicias aliadas en Siria.
También Siria acusó este viernes a Israel de perpetrar un ataque con misiles en las afueras de Damasco por segundo día consecutivo, después de que la madrugada previa, al menos dos soldados del país árabe resultasen heridos en la misma región, informó la agencia oficial de noticias siria SANA. "El enemigo israelí llevó a cabo una agresión con andanadas de misiles disparados desde la dirección del Golán sirio ocupado, contra una posición en la provincia de Rif Damasco", dijo una fuente militar no identificada en declaraciones a SANA.
El peligro de una escalada
Las defensas antiaéreas sirias lograron interceptar parte de los proyectiles, que fueron lanzados pasada la medianoche y cuyo impacto ocasionó daños materiales, de acuerdo con la fuente. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una ONG con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, aseguró que la acción tuvo como objetivo posiciones de las fuerzas gubernamentales sirias y de las milicias proiraníes que las apoyan, incluido un almacén de armas. Según un comunicado de la organización, Israel intensificó sus ataques aéreos y terrestres contra el territorio sirio durante este mes, cuando se registraron al menos seis acciones diferentes y una decena de bajas, entre ellas las de cuatro milicianos de los grupos apoyados por Teherán.
El ataque de este viernes es el segundo en apenas 24 horas, después de que la madrugada del jueves dos soldados sirios resultasen heridos en otro lanzamiento de misiles contra las afueras de la capital.
El Ministerio de Exteriores sirio denunció en un comunicado que “la región no puede gozar de paz y estabilidad si no se pone fin a la ocupación israelí y sus repetidos ataques, y sin que Israel rinda cuentas por los crímenes que cometidos”.
El portavoz de la diplomacia iraní, Naser Kanani, condenó el viernes "los ataques del régimen sionista contra algunos centros situados en Damasco y sus suburbios".