La Cámara de Apelaciones de Rosario rechazó la recusación con causa que el fiscal Sebastián Narvaja interpuso contra el juez Guillermo Llaudet Maza por su actuación para liberar en plena feria judicial y declarar la incompetencia provincial en el marco de la investigación por lavado proveniente del narcotráfico del financista Patricio Carey, de Cofyrco. La resolución fue adoptada por las juezas Bibiana Alonso, Carina Lurati y Georgina Depetris, que además le cargaron las costas al fiscal de Delitos Económicos.
Todo comienza con el crimen de Marcelo "Coto" Medrano, que generó una investigación secundaria por lavado de activos. Este hombre sindicado como narcotraficante había ido a comprar a una financiera 17 mil dólares el día que lo mataron en septiembre del 2020. Los directivos de la firma Cofyrco S.A. fueron imputados por el hecho, entre ellos Patricio Carey quien transitaba el proceso en libertad. El mundial de Qatar abrió un nuevo capítulo cuando la fiscalía quiso ampliar la imputación por un hecho nuevo y no lo encontró. Lo mandó a detener cuando regresó al país. Carey quedó detenido preventivamente y la medida cautelar fue apelada durante la feria judicial. El camarista Llaudet Maza resolvió que la detención fue ilegal y envió el caso a la Justicia Federal al entender que no es de competencia ordinaria lo que se investiga. El camarista fue recusado por el fiscal Sebastián Narvaja bajo la fundamentación de temor de parcialidad y ahora la Cámara Penal apoyó la resolución de Llaudet con una fuerte crítica al fiscal a quién cargó con las costas del trámite.
La Cámara fue enfática para rechazar las sospechas sobre el accionar de Llaudet Maza, que tomó la causa el 2 de enero pese a que había una jueza designada y aceptada por las partes para el 8 de febrero y adoptó una decisión de fondo.
Según las tres camaristas, el fiscal "irresponsablemente afirma que de la mera actuación del doctor Llaudet en el marco de esta causa surge que sus decisiones tuvieron una motivación ilícita. El hecho de que el Fiscal se valga de algunos eufemismos para matizar su acusación o plantee las cosas a modo de interrogante no lo exime de responder por las consideraciones efectuadas sin sustento alguno".
Las magistradas dijeron que la fiscalía “puede o no compartir los criterios jurídicos del magistrado y su interpretación en relación a los hechos y al derecho comprometidos. Pero en modo alguno su fundamentación en relación al fondo del asunto, ni siquiera a la luz de la “extravagante” habilitación de feria (en términos del recusante), trasluce motivos que permitan poner en tela de juicio la honorabilidad del Magistrado o generen sospechas sobre la existencia de motivaciones espurias que lo llevaran a dictar su fallo”.
"Tal y como fueron planteadas, las sospechas en relación a la motivación ilegítima del Magistrado no tienen apoyo en ninguna evidencia, sino que en realidad surgen tan sólo del enfado exorbitante en relación al contenido de una resolución jurisdiccional que el Fiscal no comparte", dicen Alonso, Lurati y Depetris.
Cabe recordar que con apoyo de la Fiscal Regional interina María Eugenia Iribarren, Narvaja hizo una denuncia administrativa contra Llaudet Maza. Tras un primer análisis, el procurador Jorge Barraguirre aconsejó iniciar una investigación.