El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, aseguró que las circunstancias en las que se dio el crimen del colectivero Daniel Barrientos en Virrey del Pino fueron muy "dudosas", pero pidió esperar el resultado de la investigación y la acción de la Justicia, a la vez que cuestionó a la oposición por "consentir" y "hasta incentivar" las agresiones sufridas por el ministro Sergio Berni.
"El asesinato a sangre fría del chofer de la línea 620 no solo es dudoso, es prácticamente inédito. Viene el colectivo, lo cruza un auto de apoyo y suben dos personas con armas realmente muy importantes. Parecía el robo de un blindado y solamente se llevaron un bolso, y después asesinaron a quemarropa al chofer. Indudablemente, hay que investigarlo", manifestó en sus primeras declaraciones públicas tras el crimen.
Kicillof recalcó que, "para ser un delito vinculado al robo, tiene elementos muy dudosos y muy sospechosos", aunque resaltó la necesidad de ser "respetuosos de las víctimas".
Al mismo tiempo, el gobernador cuestionó a la oposición y algunos medios de comunicación por "consentir y hasta incentivar" las agresiones al ministro Sergio Berni y advirtió que "no puede admitirse una violencia de ese tipo" contra un funcionario.
"Esto no parece un simple robo a un colectivo en un barrio popular. Es muy raro, y ahí empiezan todas las cuestiones, porque unos días antes estuvo Patricia Bullrich hablando de la seguridad en los colectivos. Uno no tiene que pasarse con esto porque se tiene que investigar a fondo, pero hay que prender las luces sobre estas cuestiones", recordó.
Kicillof consideró además que "hay que repudiar" la utilización política del caso y recordó que el Frente de Todos (FdT) no tuvo esa conducta desde la oposición durante la gestión de Juntos por el Cambio.
En tanto, el mandatario señaló que el caso es "tremendamente doloroso" y una "tragedia", a pesar de que su administración está haciendo una "inversión histórica y una transformación muy profunda de la Policía Bonaerense".
"Es tremendamente doloroso, cada caso es una tragedia y aunque estamos haciendo una inversión historia y una transformación sobre la Policía de Buenos Aires, con cambios en la capacitación y la organización, no quita que no tengamos que redoblar los esfuerzos y que no nos impacte el caso personalmente y como Gobierno", aclaró.
Por último, el mandatario provincial ratificó que el Gobierno a su cargo presentó una denuncia por la agresión a Berni. "Fue a dar la cara, como lo hace habitualmente", dijo sobre el accionar de Berni.
"La agresión es tremenda, es contra un funcionario, no se pueden resolver así las cosas. Es lo mismo que pasó con Cristina (Kirchner)", expresó, en una comparación con el intento de magnicidio de la vicepresidenta.
También puntualizó que los vecinos del Virrey del Pino dijeron que "no conocían a la gente que agredió al ministro", aunque de todos modos llamó a "tener cautela y esperar que lo diga la Justicia".