Las consecuencias de la incertidumbre que nubló en las últimas horas a la Ley de Alquileres ya hacen mella en el mercado inmobiliario. Mientras el Gobierno desliza que podría derogar, suspender o modificar la normativa (ver aparte), organizaciones de inquilinos ya comenzaron a recibir denuncias que apuntan a que propietarios rescindieron los contratos o frenaron las firmas de nuevos acuerdos y renovaciones a la espera de un cambio en los marcos regulatorios.

Estos volantazos tienen lugar en un mercado no menos movilizado y complicado. Es que alquilar se vuelve casi una misión imposible, en un contexto de alta inflación, poca oferta para el mercado interno y aumentos anuales del orden del 100 por ciento y la presión de las inmobiliarias por actualizaciones semestrales. Al combo explosivo hay que sumarle que cada vez más inmuebles se vuelcan al alquiler temporario para el turismo.

Qué pasa con los alquileres en 2023

Así lo explicó a Página/12 Ricardo Botana, presidente de la Unión Argentina de Inquilinos: “Estamos viendo que la gente que ya contrató con la nueva ley no puede, más allá de que sea un aumento anual, renovar con subas del 85 por ciento”. “Eso hace que, si bien es solo un aumento, la gente esté complicada los primeros cuatro o cinco meses hasta que se licúa”, comentó.

Esto tiene tres consecuencias directas en el mercado, explicaron desde una inmobiliaria porteña: por un lado, que algunos propietarios busquen negociar aumentos semestrales por fuera de lo que indica la normativa; por otro lado, que la compensación se haga de antemano, y así, por ejemplo, alquilar un monoambiente en en un barrio caro puede costar 500 dólares mensuales; finalmente, que muchos opten por retirar las propiedades del mercado y volcarlas al negocio del turismo.

Botana advierte además que en muchos casos los inquilinos que no pueden pagar optan por alquilar inmuebles que están destruidos. "No estaban ni a la venta ni alquilados. Estos inmuebles ingresan al mercado con un lavado de cara y a los meses surgen problemas estructurales muy severos y el inquilino paga algo caro y destruido”, lamenta.

Juan Arrizabalaga, referente de la Federación de Inquilinos Nacional, explicó por su parte que los propietarios “fomentan la finalización de contactos antes de tiempo”. “Te dicen que la vendieron, que esto, que aquello, porque el objetivo es llegar al precio de los alquileres temporarios, tiene que ver con los precios en dólares”, señaló.

“Hay un problema que tiene que ver con las consecuencias del mercado inmobiliario. El objetivo de derribar la Ley de Alquileres es terminar con lo poco que hay de regulación. Tener un mercado desregulado. Las consecuencias son el hacinamiento; el crecimiento de los asentamientos; que la gente deja más parte de sus ingresos en el pago de la vivienda, lo que implica después no comer; personas volviendo a los hogares de sus padres; varios hogares en una sola vivienda”.

Consejos a la hora de buscar alquiler

Consultado por Página/12, Botana dio una serie de consejos para los inquilinos que estén en la búsqueda de viviendas, ya sea por el aumento excesivo en sus contratos como por el vencimiento del mismo:

  • "Buscar la manera de hacer que la ley se cumpla. La normativa trajo más derechos y herramientas".

  • "Acercarse a las asociaciones de inquilinos".

  • Ir a ver cómo está realmente el inmueble, por este tema del ‘lavado de cara’. Como hay tan poca oferta, muchos inquilinos se tiran de cabeza a firmar el contrato”

  • “Tomarse el tiempo para tener y ver el contrato con algún letrado”.

Alquileres: qué podría suceder con los contratos vigentes si se anula la ley

Arrizabalaga, por su lado, se refirió al futuro más inmediato de los alquileres en medio de la nebulosa sobre la normativa: “No sabemos que va a pasar estos días. Por ahora no se suspendió ni derogó nada”. Y aclaró: “No es aplicable la ley anterior, que aplicaba un invento de indexación”.

Los barrios más baratos y más caros para alquilar

Según datos de la página de venta y alquiler online ZonaProp, el alquiler de un 2 ambientes en la Ciudad de Buenos Aires subió 8,3% en marzo. Esto, según sus datos, hizo que precio en el trimestre se ubicara 5,5 puntos porcentuales por encima de la inflación, sellando un incremento interanual de casi el 120 por ciento.

Además, el informe de la plataforma señala que los barrios más económicos para alquilar en la Ciudad son: Mataderos, Liniers y Floresta. En tanto, en el eslabón intermedio están: Paternal, Villa General Mitre, Coghlan y Boedo. Finalmente, los barrios más caros son: Villa Ortúzar, Chacarita y Palermo.

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