La decisión de las autoridades venezolanas de volver a encarcelar a los dirigentes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma recibió hoy una fuerte condena en el ámbito internacional. La Corte Suprema de Venezuela explicó en un comunicado que López y Ledezma habían violado los términos de su arresto domiciliario y que tenían un plan para huir del país, lo cual es negado por sus abogados.
El alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, pidió la "liberación inmediata" de todos los detenidos en Venezuela por razones políticas. "Me preocupa profundamente que los líderes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma hayan sido nuevamente puestos bajo custodia de las autoridades venezolanas tras la revocación de su arresto domiciliario", indicó el responsable en un comunicado. "Insto al Gobierno a liberar de inmediato a todas las personas detenidas por ejercer su derecho a la libertad de reunión pacífica, de asociación y de expresión", agregó.
En tanto, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, urgió al gobierno venezolano a hacer "todos los esfuerzos posibles" para resolver las tensiones e impedir más episodios de violencia. Guterres "ha tomado nota" de la decisión de revocar el arresto domiciliario López y del alcalde de Caracas Antonio Ledezma, dijo el martes el portavoz de la ONU Stephane Dujarric.
Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó "enérgicamente los operativos" para detener a los dirigentes opositores, arrestados durante la madrugada de este lunes en sus residencias por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN). “Su nuevo internamiento en prisión no solo conlleva un grave retroceso que afecta a sus derechos, sino también un hecho que agrava la crisis política en Venezuela", afirma la Comisión, cuyo pleno se encuentra en Guatemala por una visita oficial que concluye el viernes.
Desde Washington, un día después de decretar sanciones contra el presidente venezolano, el gobierno estadounidense reaccionó con máxima dureza a la nueva detención de los opositores. "Estados Unidos condena las acciones del dictador Maduro",manifestó la portavoz del presidente Donald Trump,Sarah Sanders, en rueda de prensa en la Casa Blanca.
No solo la Casa Blanca se pronunció hoy sobre el arresto de López y Ledezma. También lo hizo el Departamento de Estado. Su titular, Rex Tillerson, calificó las detenciones de "muy alarmantes" poco antes de que Sanders hablara en la Casa Blanca. "Estamos muy muy preocupados", añadió el jefe de la diplomacia norteamericana, que indicó que la administración de Donald Trump evalúa los pasos a dar ahora en la crisis venezolana.
A esa postura de condena a los arrestos se sumaron los gobiernos de Brasil, Chile, Perú, Costa Rica, Colombia, Canadá, Paraguay, España y la Argentina, entre otros países.
López había sido trasladado a arresto domiciliario el 8 de julio, después de haber sido condenado a 14 años de prisión por acusaciones de instigar a protestas violentas contra el Gobierno en 2014 que terminaron con 43 muertos. Ledezma, alcalde de Caracas, fue encarcelado en 2015 acusado de encabezar un plan para derrocar al gobierno de Maduro. También estaba en arresto domiciliario por motivos de salud.
La Justicia venezolana justificó hoy el traslado de ambos a prisión diciendo que habían incumplido las normas de su reclusión domiciliaria haciendo pronunciamientos políticos y en que había un plan para que su fuga. Ambos líderes opositores publicaron la semana pasada videos de rechazo a la elección de la Asamblea Constituyente celebrada el domingo.