Felipe Massa reveló de manera que está buscando recursos legales para anular el resultado del Campeonato Mundial de Fórmula 1 de 2008, que ganó Lewis Hamilton. El piloto brasileño, que entonces corría para Ferrari, perdió el título de ese año por un solo punto en circunstancias dramáticas durante la carrera final en Brasil. Hamilton, quien entonces conducía para McLaren, consiguió bajo la lluvia y en la última vuelta el punto que necesitaba para consagrarse.
Sin embargo, el exlíder de la F1 Bernie Ecclestone hizo nuevas declaraciones sobre el infame escándalo de “Crashgate” de ese año en Singapur, que alentaron a Massa a evaluar todas sus posibles opciones en cuanto a si el resultado del Campeonato podría anularse, 15 años después.
Massa, ahora de 41 años, declaró: “Tengo la intención de estudiar la situación, estudiar lo que dicen las leyes y las reglas. Tenemos que tener una idea de lo que es posible hacer”.
Qué fue el Crashgate
“Crashgate” sacudió el deporte cuando el Gran Premio de Singapur vio a Fernando Alonso de Renault ganar la carrera antes de que se supiera que su compañero de equipo Nelson Piquet Jr. había chocado deliberadamente para sacar un auto de seguridad que dio ventaja al español.
Dicho coche de seguridad provocó una parada en boxes de Massa que Ferrari no manejó bien. Massa finalmente terminó la carrera en 13° lugar, mientras que Hamilton acabó en tercero; una diferencia de seis puntos, pero un cambio que finalmente afectó el resultado del título.
Si bien Renault y el jefe del equipo, Flavio Briatore, fueron castigados en 2009, el resultado de la carrera se mantuvo a pesar de las protestas de Massa. Los estatutos de la FIA (Federación Internacional del Automóvil) dejaron en claro que anular la clasificación de cada temporada es imposible una vez que la ceremonia de entrega de premios de la FIA para ese año se completa, una regla establecida en el Código Deportivo Internacional de la misma.
Las nuevas revelaciones de Ecclestone sobre la Gran Premio de Singapur 2008
Sin embargo, Ecclestone reveló el mes pasado que tanto él como el entonces presidente de la FIA, Max Mosley, sabían del escándalo “Crashgate” en 2008, pero se negaron a publicar la cadena de eventos para evitar que el deporte se convirtiera en un “gran escándalo”.
“Decidimos no hacer nada en el momento”, Ecclestone le dijo a F1-Insider. “Queríamos proteger el deporte y salvarlo de un gran escándalo. Es por eso que usé lenguas angelicales para persuadir a mi exconductor Nelson Piquet de que mantuviera la calma”.
“En aquel entonces, existía la regla de que una clasificación de campeonato mundial después de la ceremonia de entrega de premios de la FIA a fin de año era intocable. Entonces Hamilton recibió el trofeo y todo estuvo bien”, dijo.
“Tuvimos suficiente información a tiempo para investigar el asunto. De acuerdo con los estatutos, debimos haber cancelado la carrera en Singapur bajo estas condiciones”, agregó Ecclestone y completó: “Significa que nunca hubiera sucedido para la clasificación del campeonato. Y entonces Felipe Massa se hubiera convertido en campeón del mundo y no Lewis Hamilton”.
La reacción de Felipe Massa
Al enterarse de esta nueva información, Massa dijo a Motorsport.com que analizará sus, aunque limitados, recursos legales; destacó el ejemplo del dopaje de Lance Armstrong y el despojo de sus victorias del Tour de Francia.
“Hay una regla que establece que cuando se decide un campeonato, desde el momento en que el piloto recibe el trofeo de campeón, ya no se pueden cambiar las cosas, aun si se demuestra un robo”, dijo Massa, quien finalmente no ganó un título mundial de F1.
“En ese momento, los abogados de Ferrari me hablaron sobre esta regla. Consultamos a otros abogados y la respuesta fue que no se podía hacer nada. Así que lógicamente creí en la situación”, explicó.
“Pero después de 15 años, escuchamos que el exdueño de la categoría dice que se enteró cuando sucedió en 2008, junto con el presidente de la FIA, y no hicieron nada para no empañar el nombre de F1”, declaró Massa.
“Es muy triste, saber que se suponía que el resultado de esta carrera sería cancelado y yo tendría un título. Al final, fui yo quien más perdió con este resultado. Entonces, vamos a explorar para entenderlo todo”, agregó. También dijo que “ya hemos visto otras situaciones en el deporte, como Lance Armstrong, que se demostró que se dopó y perdió todos los títulos. ¿Cuál es la diferencia?”.
Massa, que no ha hablado con Ferrari sobre posibles vías legales, agregó que emprender cualquier acción retrospectiva no sería cuestión de una compensación financiera, sino simplemente de “justicia”.
“Hay reglas, y hay muchas cosas que, dependiendo del país, no puedes retroceder después de 15 años para resolver una situación”, dijo. “Nunca lo perseguiría desde una perspectiva financiera. Lo buscaría pensando en la justicia. Creo que si te castigaron por algo que no fue culpa tuya, y es producto de un robo, de una carrera arreglada, hay que hacer justicia. De hecho, la medida correcta es cancelar el resultado de esa carrera. Es la única justicia que se puede hacer en un caso así”, manifestó.
A pesar de los comentarios de Massa, sus opciones parecen escasas, ya que el propio Código Deportivo Internacional de la FIA establece que las protestas y revisiones vencen 14 días después de una competencia y cuatro días antes de la entrega de premios de la ceremonia de ese año.
Tampoco puede utilizar el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo), que no tiene jurisdicción sobre la FIA en asuntos como este, siendo el Tribunal Internacional de Apelaciones independiente la máxima autoridad en el deporte.
De The Independent para Página/12