El ex jefe de la Policía de la Ciudad, José Potocar, fue excarcelado bajo fianza en la causa que es sospechado como uno de los líderes de una banda policial que pedía coimas a vecinos de Núñez y Saavedra a cambio de “seguridad”. La decisión de que el comisario quedase en libertad a la espera que se resuelva su futuro judicial fue tomada por el juez Ricardo Farías, el mismo que el 25 de abril imputó a Potocar por los delitos de “asociación ilícita” y “cohecho”, y quien mantuvo su detención durante más de tres meses. En diálogo con PáginaI12, el abogado del primer jefe de la nueva fuerza de seguridad porteña, Cristian Poletti, cargó contra José María Campagnoli, fiscal que impulsó la investigación. “No había ninguna razón para que Potocar esté preso, nunca se presentó una prueba contundente”, estableció. Por su parte, un vocero del Ministerio de Seguridad porteño indicó que aún no hay un candidato oficial para ser el nuevo jefe de la Policía porteña.
Luego de estar 98 días detenido en el edificio Centinela de Gendarmería Nacional, ubicado en el barrio de Retiro, Potocar volvió a su casa. La decisión parecía encaminada: doce días atrás, la Cámara Nacional del Crimen dictó la falta de mérito para otro imputado de la misma causa y jefe de Potocar al momento de la denuncia, el comisario Guillermo Calviño, al argumentar que los indicios recogidos en la investigación –en especial el cuaderno secuestrado de la comisaría 35a– “no resultaban concluyentes”, de acuerdo al fallo judicial. Si bien Potocar no obtuvo la misma resolución que su ex superior (y algo más que eso, ya que en diciembre del 2016, el propio comisario recomendó al Poder Ejecutivo porteño que Calviño asumiera como Superintendente), su abogado Poletti aseguró que fue excarcelado bajo una fianza de 100.000 pesos por la misma razón que había dado la Cámara. “Veníamos pidiendo una serie de pruebas al juez (Farías) que confirmen la acusación. Desde la detención de Potocar, el fiscal Campagnoli nunca presentó entrecruzamientos telefónicos, pruebas caligráficas del cuaderno secuestrado y sobre todo, no citó a declarar a los comerciantes que supuestamente fueron coimeados”, sostuvo.
Los integrantes de la fiscalía de Núñez y Saavedra salieron rápidamente a rechazar la decisión del juez. Según la acusación de Campagnoli, en 2015, policías de la comisaría 35° recorrían ambos barrios exigiendo dinero a los vecinos a cambio de protección. Parte de esa recaudación, de acuerdo a la investigación, llegaba a la Dirección General de Comisarías (DGC), en ese momento a cargo de Potocar. La declaración indagatoria del ex comisario Hernán Kovacevic –también imputado por la misma causa, aunque “premiado” sin prisión preventiva– en febrero siguió en la misma línea: aseguró que tanto Potocar como Calviño y Susana Aveni (ex jefa de circunscripción) eran los destinatarios finales de las coimas que pedía la seccional. Luego, en un allanamiento en la comisaría, se secuestraron cuadernos de la oficina del por entonces jefe de la departamental, comisario Norberto Villarreal, actualmente prófugo. En esa libreta aparecía la inscripción DGC, por la dirección que dirigía Potocar.
El 12 de mayo, ya detenido, Potocar renunció a su cargo como jefe de la Policía de la Ciudad. En ese momento, el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Martín Ocampo, dispuso que el subsecretario de aquella cartera, Marcelo D´Alessandro, estuviera al frente de la Policía hasta un nuevo nombramiento. Hoy, 79 días después, no hay noticias de un nuevo jefe. “Hay otras cosas en las que nos estamos enfocando. Por ahora, todo sigue como está, no hay nadie en carpeta”, informó a este diario una fuente del ministerio.
Informe: Jeremías Batagelj.