El gobierno del presidente Lula da Silva cumple 100 días al frente de Brasil. La gestión tuvo un inicio turbulento con el intento de golpe de Estado protagonizado por seguidores del exmandatario Jair Bolsonaro.
En los meses siguientes, la administración de Lula mantuvo su foco en la reconstrucción y la unión del país a través del lanzamiento o relanzamiento de programas sociales para facilitar el acceso a la vivienda, salud y alimentación. El gobierno también enfrentó la crisis humanitaria del Pueblo Indígena Yanomami, fuertemente golpeado por la minería ilegal impulsada por la administración dele expresidente Bolsonaro.
Brasil volvió: vivienda, alimentación y salud
Lula escribió un artículo titulado “Brasil volvió” y en el texto cita los programas sociales que lanzó o relanzó en estos primeros tres meses. Uno de ellos fue el programa Bolsa Familia, una de las iniciativas emblemáticas de los primeros gobiernos de Lula. A través del programa Bolsa Familia, unas 20 millones de familias reciben en promedio 750 reales mensuales (144 dólares).
También se refirió al Programa de Adquisición de Alimentos (PAA). A través de este proyecto el gobierno compra la producción de pequeños productores agrícolas para personas en situación inseguridad alimentaria.
Para Lula, Brasil dejó de ser un “paria internacional” para volver al mundo de la mano de los programas sociales olvidados durante el gobierno de Jair Bolsonaro.
"Priorizamos lo urgente"
Lula también retomó una importante iniciativa conocida como Minha Casa Minha Vida con el que financia políticas de vivienda para personas de bajos ingresos y también para personas en situación de calle. El relanzamiento del programa Mais Médicos, el gobierno de Lula busca reforzar desde el gobierno nacional la asistencia médica en los estados y municipios del gigante sudamericano.
En estos 100 días el gobierno de Lula también avanzó con un reajuste del 36% para el Programa Nacional de Alimentación Escolar (PNAE). La iniciativa prevé transferir los montos a los estados y municipios para la compra de almuerzos escolares para alumnos en todas las etapas de la educación básica pública.
“Gobernar es atender las urgencias, al mismo tiempo que creamos las bases para un futuro mejor. En estos primeros 100 días priorizamos lo urgente. Partiendo de lo necesario, para hacer lo posible”, escribió Lula.
El mandatario brasileño también destacó la creación de ministerios para atender áreas importantes para el gobierno como la igualdad racial, derechos de las mujeres, pueblos indígenas y cultura. Lula nombró 11 mujeres para dirigir un total de 38 ministerios, la mayor proporción de ministras de la historia de Brasil.
El gobierno de Lula también atendió la crisis humanitaria del Pueblo Indígena Yanomami, fuertemente afectado por la llegada de la minería ilegal, impulsada por el expresidente Bolsonaro. Lula viajó al estado amazónico de Roraima e implementó una serie de medidas para impedir la llegada de mineros ilegales o "garimpeiros".
"En los 1.360 días venideros, nos mantendremos firmes en la reconstrucción de un país más desarrollado, justo y soberano, con paz, armonía y oportunidades para todos. Brasil está de vuelta", concluyó el mandatario.