El presidente de EE.UU. Joe Biden, arremetió este martes contra el juez federal de Texas que el viernes pasado emitió un fallo para frenar la comercialización de una píldora usada en más de la mitad de todos los abortos en el país.

"Lo que hizo el juez estuvo completamente fuera de lugar", afirmó Biden consultado por la prensa, antes de embarcar en el avión presidencial Air Force One hacia Irlanda del Norte y República de Irlanda.

La Casa Blanca ya había criticado la decisión del magistrado Matthew Kacsmaryk, nombrado por el expresidente Donald Trump, al considerar que pone en peligro la vida de las personas gestantes en EE.UU.

Además, la Casa Blanca cree que ese fallo restringe la habilidad de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA), el regulador médico en EE.UU. para aprobar el uso de medicamentos.

Un recurso contra el fallo

El Departamento de Justicia interpuso el lunes un recurso contra el fallo del juez de Texas ante la Corte de Apelaciones del Quinto Distrito con sede en Nueva Orleans, una de las más conservadoras del país.

Está previsto que el fallo del juez de Texas entre en vigor este viernes, en lo que supondrá un nuevo golpe al movimiento por los derechos reproductivos, casi un año después de que el Tribunal Supremo de EE.UU. acabara con la protección constitucional del aborto.

Al haberse eliminado con Trump el precedente judicial "Roe contra Wade" de 1973, cada estado empezó a proclamar diferentes leyes para prohibir o restringir el derecho al aborto. Sin embargo, el movimiento contrario al aborto no se ha quedado ahí y ahora ha emprendido una nueva batalla para prohibir la terminación del embarazo con medicamentos.

En aquellos estados donde el procedimiento se había prohibido, algunas mujeres estaban recurriendo a píldoras porque son fácilmente accesibles, ya que se pueden recibir por correo postal. Específicamente, el fallo del juez de Texas se dirige contra un medicamento llamado mifepristona, cuya comercialización fue aprobada por la FDA en 2000.

Un medicamenteo seguro

La FDA considera que ese medicamento es totalmente seguro; pero los activistas antiaborto alegan que presenta riesgos. Nunca antes un juez había anulado las decisiones médicas de la FDA, cuyos criterios para aprobar medicamentos son un referente en todo el mundo.

El caso ha generado tanta preocupación por las consecuencias que pueda tener para la aprobación de otros medicamentos, que 200 directivos de las farmacéuticas más importantes de EE.UU. publicaron el lunes una carta abierta en la que piden que el fallo del juez de Texas sea anulado. Consideraron a la decisión tomada en el estado de Texas como "indiferente a la ciencia".

Para la congresista demócrata por Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez, el hecho de que Biden haya rechazado el fallo que suspende el uso de la píldora abortiva, es “un extraordinario precedente”. Y agregó que no considera que la Corte Suprema tenga autoridad sobre la FDA, y si así lo pretendiera, se generaría una crisis legal: “si la corte hiciese eso, esencialmente instituiría una prohibición nacional del aborto”. Por el contrario, el congresista republicano por Texas, Tony Gonzáles, amenazó con impulsar la desfinanciación de ciertos programas de salud federales ligados al aborto.

La palabra de la ciencia

Lawrence Gostin, profesor de medicina legal en la Universidad de Georgetown declaró a la BBC "esa fue una desición "muy pobremente razonada" y espera que sea rechazada por la corte, pero no tiene certeza de que así sea: "esa es probablemente la corte de apelaciones más conservadora del país". Y agregó: "si la FDA no puede aprobar esta droga, no estoy seguro qué es lo que puede aprobar... la droga ha estado en el mercado por más de dos décadas y tiene un registro de salud y seguridad impecable".

La Mifepristona se usa en combinación con el misoprostol: la primera droga detiene el embarazo y la segunda vacía el útero.

La Alianza Defendiendo la Libertad -un conservador grupo cristiano con legistas- argumenta que la FDA y su proceso de aprobación de medicamentos que insume 4 años, ignoró el potencial impacto de la mifepristona en los cuerpos de adolescentes. Erin Hawley, miembro de la agrupación, declaró el lunes que "al haber aprobado ilegalmente esta peligrosa droga química, e imponiendo el régimen de aborto encargado por correo, la FDA puso a las mujeres en el camino del daño y la agencia es responsable por sus temerarias acciones; el embarazo no es una enfermedad y las drogas químicas abortivas no proveen beneficios terapéuticos".

El Congreso Americano de Obstetras y Ginecólogos declaró que la mifepristona es segura y efectiva.