Este martes la Cámara de Diputados chilena aprobó la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales. El proyecto fue presentado en 2017 por la diputada del Partido Comunista Karol Cariola y la ahora ministra de la Secretaría General del gobierno, Camila Vallejo.
En diálogo con AM750, Cariola explicó los puntos principales de la nueva ley y cómo se logró su aprobación en el parlamento.
"La ley reduce la jornada laboral de 46 a 40 horas semanales en el marco de 6 días de trabajo. Además, se puede aplicar la modalidad 4x3, de 4 días de trabajo y 3 libres, con un tope de 10 horas por día. Esto se puede aplicar si existe acuerdo entre el empleador y los trabajadores organizados", detalló.
Según la diputada comunista, la iniciativa se logró a través de espacios de diálogo tripartito entre el gobierno, los sindicatos y representantes de empresas y pequeñas y medianas empresas.
Cariola contó que el proceso de aplicación de la nueva normativa se dara de manera gradual. El sector privado tiene un plazo de cinco años -como máximo- de implementación progresiva. "De cualquier manera, incentivamos a que quienes puedan hacerlo lo antes posible, lo hagan. Ya hay más de 500 empresas a nivel nacional que están implementando la reducción, mayoritariamente pequeñas y medianas empresas", agregó.
En Aquí, Allá y en Todas Partes, la redactora del proyecto subrayó que el cambio en la jornada laboral no afecta el salario de los trabajadores y "mejora las condiciones laborales y de vida". Además, destacó que otro beneficio de la norma es el fortalecimiento del rol de los sindicatos "para poder tomar decisiones colectivas considerando que, de lo contrario, se podrían generar mecanismos de arbitrariedad entre los empleadores y el trabajador a propósito de la asimetría en esa relación".
Por otra parte, recordó que la última vez que se redujo la jornada laboral en Chile fue en 2005 y que desde 1932 la Organización Internacional del Trabajo (OIT) promueve a los países miembro su implementación. "Es un desafío que teníamos hace muchos años", señaló.
Por último, planteó que uno de los principales argumentos en contra de la ley fue que se podía poner en riesgo la estabilidad de la economía nacional y recordó la postura del expresidente Sebastián Piñera: "Fue un férreo opositor, tanto así que su Ministro de Trabajo dijo que si se implementaba la jornada laboral no íbamos a poder participar de la Copa América", concluyó.
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