Tras una convención de ciudadanos que aprobó por mayoría avanzar en la legalización de la eutanasia o la muerte asistida en Francia, el presidente Emmanuel Macron ordenó a su gobierno elaborar un proyecto de ley antes del verano europeo e instó al Parlamento de ese país a tratarlo.
Luego de tres meses de debate, el 75% de las personas que fueron seleccionadas al azar para conformar la convención consultiva votó modificar la normativa vigente, la Ley Claeys-Leonetti de 2016, que permite que los pacientes con enfermedades terminales rechacen el tratamiento y reciban "sedación profunda y continua" hasta morir, pero prohibe la eutanasia y la muerte asistida.
En el primer caso, los médicos administran medicamentos letales; mientras que en el segundo –también llamado “suicidio médicamente asistido”– son ellos quienes ponen a disposición los fármacos necesarios pero es el paciente el que se los administra.
El proyecto de ley de eutanasia se presentará a finales de septiembre
“Tengo una opinión personal, como todos los franceses, que puede evolucionar, evoluciona y tal vez evolucionará", afirmó Macron al conocerse los resultados, después de reunirse con la convención.
Y anunció que habrá un proyecto de ley para la legalización hacia “fines del verano 2023”, que en Europa termina formalmente el 23 de septiembre.
Sin embargo, el mandatario definió “líneas rojas” que no deben ser cruzadas, como por ejemplo la ayuda activa para la muerte de menores o la necesidad de "garantizar la expresión de la voluntad libre e ilustrada" y de la "reiteración de la elección".
Habrá un plan de 10 años para garantizar el acceso a los cuidados paliativos
Para “hacer cumplir la normativa actual”, Macron también anunció que pondrá en marcha un plan a diez años que incluirá las inversiones necesarias –sin dar mayores precisiones respecto a los montos de financiación–, para el manejo del dolor y el desarrollo de los cuidados paliativos.
En ese sentido, afirmó que "el Estado tiene una obligación de resultados" para asegurar "el acceso efectivo y universal a la atención al final de la vida".
Países donde es legal la eutanasia
Actualmente, la eutanasia es legal en ocho países y en algunos estados de Australia y Estados Unidos. Entre ellos, Colombia, España, Países Bajos, Bélgica, Austria, Alemania, Suiza y Luxemburgo. Y en Uruguay está en tratamiento un proyecto que, se espera, será aprobado en el corto plazo.
Otros países también debaten sobre la muerte asistida. Así, el 9 de diciembre pasado, el parlamento portugués aprobó por tercera vez un proyecto de ley para legalizar la eutanasia, pero el presidente Marcelo Rebelo de Sousa, ferviente católico, vetó la norma por tercera vez a comienzos de enero.
Quiénes están en contra del debate
En las últimas semanas, representantes de las religiones católica, protestante, judía y musulmana de Francia expresaron su preocupación por un cambio en la ley, al tiempo que enfatizaron que no están presentando un frente político unido.
Aseguraron que quieren que se desarrollen los cuidados paliativos y se evalúe la ley Claeys-Leonetti, pero defienden el respeto "absoluto" a la vida. La Conferencia Episcopal Católica Romana de Francia dijo que la asamblea de ciudadanos marcó un alejamiento de la "herencia ética" de Francia como país católico.
“Durante las últimas décadas, Francia ha encontrado gradualmente un equilibrio al rechazar las terapias inútiles y promover los cuidados paliativos. Este 'camino francés' dice algo sobre la herencia ética de nuestro país”, expresó la iglesia católica en un comunicado.
El rabino jefe de Francia, Haïm Korsia, expresó que marcaría una "ruptura antropológica", y "al borde de la eugenesia". Mientras que el rector de la Gran Mezquita de París, Chems-eddine Hafiz, subrayó que "el suicidio es un pecado" en el Islam.