Un regreso al colegio secundario es posible a través de la miniserie Lucky Hank (AMC), que se aleja del estereotipo del docente inspirador y estimulante para seguir a un profesor hastiado por el aula, el clima escolar y sus estudiantes. Entre caras y cerebros de Breaking Bad, The Killing y The Office, esta mirada del clima estudiantil no propone abrir cabezas y corazones sino, en todo caso, sugerir que la acidez, la mala onda y los gruñidos también pueden ser recursos didácticos.