La precandidata presidencial del PRO, Patricia Bullrich, se tomará licencia como titular del partido para dedicarse de lleno a la campaña. Así lo expresó a través de una carta en la que repasó su gestión y consideró “imprescindible que mis actos sean claros y no se confunda la institucionalidad partidaria con mi pre candidatura a Presidenta de la Nación”. En medio de una fuerte interna con Horacio Rodríguez Larreta, la decisión de la exministra de Seguridad revela dos movimientos que apuntan a reforzar su figura dentro del espacio. Por un lado, presiona al jefe de Gobierno para que adopte una actitud similar y tome licencia de sus funciones al frente del Ejecutivo. Por otro, deja el partido en manos de Federico Angelini, un hombre de su entorno que es, a la vez, cercano a Mauricio Macri. De esta forma, Bullrich cierra filas con el exmandatario y cristaliza los dos bandos al interior del Pro.
El anuncio llegó vía redes sociales con un tuit en el que la precandidata a presidenta declaró ser “consecuente con los valores de la verdad y la transparencia” al dar un paso al costado como titular del PRO, en el marco de una disputa dentro del partido amarillo en la que tanto Bullrich como Larreta buscan mostrarse como garantes de posicionamientos éticos inobjetables. Desde ese lugar le recriminó al mandatario porteño, hace algunos días, la decisión de convocar a elecciones concurrentes en la Ciudad, sostuvo que “manipuló las reglas electorales” y se diferenció alegando: “Nosotros seguimos por el camino de los valores”.
Esta vez, Bullrich dio un paso más y puso en una posición incómoda al jefe de Gobierno. En la carta dirigida al Consejo Directivo del Pro, titulada “Predicar con el ejemplo”, la exministra señaló cuál es el rumbo que debe seguir quien se proponga conducir el país. “Quienes nos ofrecemos para ejercer responsablemente ese liderazgo, debemos hacer todos los esfuerzos para separar nítidamente cada institución, dando pasos en un sentido correcto que afiance la República, sin aprovecharnos de los cargos públicos o partidarios”, indicó en un mensaje que tuvo como destinatario al alcalde porteño.
La pelota ahora está del lado de Larreta, quien deberá decidir si toma licencia de su cargo al frente del Ejecutivo para acelerar en el tramo final de la campaña, siguiendo los pasos de Bullrich, o si continúa recorriendo el país alternando actos proselitistas con anuncios de gestión.
En tanto, quien sucederá a Bullrich en la presidencia del PRO será su actual vice, el diputado nacional por Santa Fe, Federico Angelini. Persona de confianza de Macri, encabezó la lista de legisladores en 2019 y perdió en las PASO para definir candidatos a senador en las elecciones de 2021 ante Carolina Losada, a quien podría acompañar en la fórmula para la gobernación santafesina este año. Su llegada a la conducción nacional del Pro se da luego de que el exmandatario lo promoviera como vicepresidente primero en la última renovación de autoridades. También por designio de Macri llegó a ser uno de los principales armadores políticos de la campaña de Bullrich en el interior del país.
La jugada de la exministra le marca el terreno a Larreta una vez más, ya que el cambio de nombres anticipa una injerencia mayor del macrismo en el partido y en la interna, luego de que el mandatario porteño se haya decantado por proteger el acuerdo con el radicalismo antes que la perpetuación del PRO en la Ciudad con la inclinación de la cancha en favor de Jorge Macri. Así, la grieta amarilla divide por un lado a la entente Bullrich-Macri-Vidal y por otro al larretismo que está cada vez más aislado.
El jefe de Gobierno, por su parte, aun no se pronunció acerca de la licencia de Bullrich ni de la asunción de Angelini. El viernes por la tarde, en conferencia de prensa desde Mendoza, adonde viajó para apoyar a los candidatos de Cambia Mendoza, ratificó su “compromiso con la unidad de Juntos por el Cambio”: “Yo creo en la unidad, trabajo por la unidad. Y tenemos la responsabilidad todos los dirigentes del país de Juntos por el Cambio de reforzar y fortalecer esa unidad en todo el país”, dijo sin referirse a la interna. Y se mostró junto a Alfredo Cornejo, quien se postuló como candidato a gobernador tras coquetear con acompañar en la fórmula presidencial a Bullrich.