“Estamos en presencia del proyecto de fútbol femenino más importante del país”. Carlos Casteglione no tiene dudas. El ex defensor campeón sudamericano con Arsenal es ahora entrenador y hace un par de años se sumó a esta idea puntana de fundar un club de cero para darles la chance a las chicas de la provincia de cumplir el sueño de jugar al fútbol. Hoy el San Luis FC es sinónimo de oportunidades, sueños, formación y éxito.
Como idea nació en 2019 y oficialmente hace dos años, cuando luego de 10 meses de estudio y organización se formó un plantel fuerte para arrancar en la tercera división de la AFA, siempre con un objetivo ambicioso. Los resultados sorprendieron: ascenso de forma invicta, ganando 27 de 32 partidos (5 empates), con 135 goles a favor y apenas 16 en contra. Fue el primer paso. Pero el avance furioso no se detiene, ahora en la segunda categoría, habiendo ganado los cuatro juegos de su zona, con 28 goles a favor y apenas uno en contra, para un total impactante de 31 triunfos en 36 juegos, con 163 goles a favor y 17 en contra. Interesante detenerse para saber qué hay detrás del éxito deportivo de una tendencia que no se queda en palabras ni en resultados...
“Esto que pasa en San Luis lo describiría como una revolución en el fútbol femenino de la provincia. El crecimiento ha sido impresionante, impensado por lo rápido. En los resultados, en todo. Hablamos de un proyecto que sentó las bases de algo distinto”. Melina Salinas es local y sabe de lo que habla. Nacida en Tilisarao, hace 19 años, está en el proyecto desde el comienzo, luego de inicios en Sarmiento y Juventud Unida. Justamente Juventud y Estudiantes, los clubes puntanos que están en el Federal A masculino, no tuvieron la ambición para buscar potenciar el fútbol femenino y ese rol lo tomó la Secretaría de Deportes, creando una nueva institución para ir por un proyecto superador.
“El proyecto surge con la intención de fomentar al desarrollo fútbol femenino en la provincia aprovechando que hay muchas chicas que juegan, pero por ahí no contaban con la contención necesaria por parte de los clubes. A fines de 2018 se empieza a trabajar en el proyecto y en 2019, con la creación de la primera Copa Provincial femenina, la idea fue fusionar a los dos equipos que llegaron a la final y crear un club que nos represente a nivel nacional, para lograr un efecto contagio y tener equipos que quieran competir de forma profesional. Con esta iniciativa logramos que muchas chicas se quisieran anotar en San Luis FC y al ya no haber más cupo en la institución, decidieron comenzar en otros clubes. Hoy existen más instituciones que apostaron a desarrollar el fútbol femenino y quieren participar de la tercera edición de la Copa Provincial porque otorgará una plaza para el Torneo Federal, que les permitirá transitar un camino similar al de San Luis FC”, explica Cintia Ramírez, la secretaria de Deportes que fue ajedrecista de chica y tomó este cargo en abril del 2018.
Casteglione se recibió de DT en 2015 y en 2019 dirigió a Ituzaingó en la B Metro. Pero luego de la pandemia decidió radicarse en San Luis y ahí recibió el llamado de Agustín Alessio, Jefe del programa Desarrollo Deportivo, a quien conocía de su paso como jugador por la provincia, y le ofreció ser la cabeza de este proyecto. “Enseguida dije que sí porque sé con la seriedad con que trabajan acá y cómo logran lo que se proponen. Comenzamos a cranear el proyecto y nos reunimos con las chicas puntanas que jugaban en Buenos Aires para ver a cuáles podíamos repatriar. Logramos que volvieran varias y armamos un equipo muy competitivo para la C”, recuerda este ex jugador de larga trayectoria en Primera y el ascenso argentino. “Es mi primera experiencia al frente de un equipo de chicas y está siendo todo muy lindo, desde dirigirlas hasta comprenderlas, hasta ayudarlas, dándoles herramientas para mejorar. Hablamos de chicas con historias muy fuertes, que han sido muy discriminadas por querer jugar al fútbol, cumplir su sueño, y acá hemos logrado contenerlas y, sobre todo, acortar la brecha entre fútbol masculino y femenino que sigue siendo grande, pero mucho menor, al menos acá”, comenta mientras precisa que 15 de los 28 jugadoras son puntanas.
Los argumentos que apoyan lo que comenta el entrenador son apabullantes, empezando por la estructura y logística detrás del equipo principal. “Tenemos dos PF, ayudante de campo, tres utileros, entrenador arquero, video analista, médico, kinesiólogo, nutricionista, coordinador, psicólogo deportivo y jefe de prensa. No es normal en un equipo femenino, por eso digo que es el principal proyecto del país. Podemos atender muy bien a las chicas, tenerlas todas contenidas. No se nos pasa ningún detalle. Ahora sumamos los GPS para poder controlar y ajustar las cargas de los entrenamientos. También tenemos video análisis en vivo, tanto en entrenamientos como en partidos. Por todo esto digo que es el mejor proyecto femenino del país. Queremos llegar fuertes a la Primera División”, detalla.
Los resultados llegaron desde el primer día, aquel 6-1 a Berazategui en la C, en abril del año pasado. El título logrado de forma invicta, tras 32 partidos, se festejó en el estadio Juan Gilberto Funes, pero sólo fue el comienzo. Ya se estaba planeando duplicar la apuesta en segunda división. Se mantuvo la base pero, a la vez, llegaron 12 jugadoras nuevas, incluyendo tres extranjeras, como la arquera mexicana Mariana Zárraga, la extremo paraguaya Maribel Portillo (ex Olimpia) y la volante central uruguaya Nikol Laurnaga (ex Nacional). “Buscamos algunas jugadoras profesionales que se adaptaran rápidamente a otro ritmo de juego y forma de entrenar”, comenta Casteglione.
Los resultados están a la vista: 4-1 y 17-0 a Argentino de Quilmes, 4-0 a All Boys en Floresta y luego un 3-0 a Morón, en San Luis, para quedar punteras absolutas del grupo A, siendo el mejor de un torneo de 22 equipos que recién comienza. “La ambición era tener una muy buena primera temporada y lo logramos, con el título. La idea es repetirlo y llegar a Primera. Sabemos que no será fácil, pero las herramientas están todas. No nos podemos quejar, debemos mantener la humildad y el enfoque. Por suerte somos un equipo que no se conforma y siempre busca más, jugar mejor y tener resultados”, admite Casteglione, que el año pasado buscó armar un equipo intenso y veloz, porque veía que en eso podían sacar diferencias, como pasó. “En la nueva categoría notamos mejor capacidad física, lo que genera más roces, partidos con más dinámica y trabados. Pero creo que estamos para pelear uno de los dos ascensos con otros 7/8 equipos que están en un nivel al nuestro”, analiza.
Las chicas no pueden estar más felices. “Este proyecto lo describo como algo con mucha visión, compromiso y trabajo. Me impactó que acá se apueste tanto por el fútbol femenino en general. Me hace sentir muy cómodo estar en un lugar así. Es un sueño vivir de lo que nos gusta, jugar a la pelota. Estamos todas muy felices y agradecidas”, sumó Agostina Gulino, la lateral izquierda mendocina de 20 años. “Lo mejor de esta experiencia ha sido conocer a mis compañeras, a un hermoso cuerpo técnico y la gente que nos ayuda cada día. Futbolísticamente hemos crecido, gracias a las herramientas que nos han dado. Ojalá que este año sigamos en este proceso de crecimiento. Esperemos que el proyecto siga ahí firme y podamos llegar a Primera”, completa Salinas. “Podemos repetir lo de C en esta categoría y ascender. Tenemos un equipo muy completo, que va para adelante y sueña con grandes cosas”, agrega Gulino.
Lo más trascendente es que el proyecto va más allá del primer equipo. “No es fácil comenzar con un club de cero. Pero, por suerte, en dos años hemos logrado armar todas las divisiones formativas, poder competir en liga local, reserva, Sub 15 y escuelita. Hemos mejorado en el caudal de chicas, logrando que muchas chicas se animen a jugar”, precisa Casteglione.
Cintia Ramírez cuenta cuál es el objetivo más profundo. “Evitar el desarraigo de las chicas, para que no se tengan que ir tan lejos para hacerse profesionales y que tengan acá una institución que las acompañe y contenga. Hoy hay varias puntanas jugando en Buenos Aires y hasta en el exterior, porque en su momento no había un club que las contenga. Ahora es al revés, algunas están volviendo y tal vez en el futuro haya aún más. Además, el proyecto busca fomentar que muchos más clubes quieran seguir este camino. La misión del proyecto es que todas las categorías inferiores participen en AFA y que al mismo tiempo contagie a más clubes para desarrollar el fútbol femenino”, resalta.