El Concejo Municipal retomará hoy el debate sobre la regulación de las aplicaciones de movilidad para el transporte público de personas en Rosario escuchando la postura que tienen sobre el tema los conductores de remises. En el cuerpo legislativo se analizan más de seis proyectos que plantean distintas formas de incorporar el uso de app móviles al servicio de transporte local, que van desde posturas intermedias y graduales a otras más permisivas.

Los ediles y edilas de la Comisión de Servicios Públicos recibirán hoy en audiencia a representantes de la Federación Argentina de Remises, la cual reúne a todos los gremios de trabajadores remiseros del país, para que sienten posición sobre el funcionamiento de las aplicaciones móviles para el traslado de pasajeros. Este encuentro se da en el marco de una serie de audiencias que viene teniendo el Concejo desde el año pasado con distintos actores que tienen algún interés relacionado con el tema. De esa manera, los concejales ya escucharon la posición de los titulares de taxis, de los peones y de las mujeres taxistas.

Consultada por Rosario/12 sobre el avance del tratamiento de las iniciativas presentadas, la presidenta de la Comisión de Servicios Públicos, Verónica Irizar, aclaró que hasta ahora solo se ha dado un debate público pero que desde el punto de vista legislativo “el debate aún no está cerrado sino que recién se está empezando a dar”. En ese sentido, explicó que ahora el objetivo es que los asesores de cada bloque terminen de analizar los distintos expedientes presentados para poder empezar a discutirlo políticamente. Irizar detalló que, mayoritariamente, hay un consenso respecto de que se habilite y se regule el uso de este tipo de aplicaciones, mientras que la principal discusión pasa por autorizar o no el uso de autos sin licencia para que funcionen bajo la modalidad autónoma que les permite aplicaciones como Uber.

Desde el oficialismo la propuesta es que se regule el uso de estas apps pero dentro del marco que regula a taxis y remises, es decir, autos habilitados por el municipio, ajustados a cronogramas de funcionamiento y a una tarifa fijada. Por el contrario, el edil de Juntos por el Cambio, Carlos Cardozo, unificó algunos proyectos de su bloque en uno más abarcativo, que plantea un funcionamiento que no esté sujeto a itinerarios,  frecuencias ni horarios fijos. “Los conductores podrán prestar el servicio únicamente cuando existan solicitudes que hayan sido aceptadas y/o procesadas a través de la aplicación correspondiente”, explicó en una entrevista el edil macrista.

Mientras el debate continúa en el Palacio Vasallo, la realidad marca que empresas como Uber funcionan sin marco legal en la ciudad, aunque no resultan sencillas de sancionar. En ese sentido, la secretaria de Control y Convivencia municipal, Carolina Labayru, explicó a este medio que los conductores de Uber les piden a los pasajeros que se sienten como acompañantes: “Muchas veces hay que tratar de demostrar que no hay conexión entre el pasajero y el conductor. Generalmente es el inspector el que se da cuenta en los controles rutinarios y en muchos casos el propio pasajero declara que lo tomó a través de una aplicación”. Por otro lado, la funcionaria municipal detalló que en caso de detectarse, al infractor le cabe la misma sanción que a quienes son choferes de remises ilegales: la remisión del vehículo y una multa. “El Código de Convivencia contempla multas más caras para quienes despachen viajes mediante aplicaciones móviles, llegando a los 300 mil pesos”, aclaró Labayru.