Educar para el mercado es el nuevo libro que Daniel Filmus compiló y prologó y que ayer se presentó. El título es una síntesis de lo que, en palabras de algunos de los autores de los ocho capítulos que componen el trabajo, expresa la orientación que tiene para la educación el gobierno de Cambiemos. La indignación por lo que está ocurriendo son el eje que une los diferentes artículos. Algunas de las más controvertidas frases del ex ministro de Educación y actual candidato a senador por la provincia de Buenos Aires de Cambiemos, Esteban Bullrich, fueron el disparador para analizar el material. Allí se explica cómo el macrismo busca privatizar la educación y debilitar la organización sindical para terminar en una educación “para pocos”. Con el auditorio de UTE-Ctera más que repleto a eso de las 18.30 de ayer, algunas de las voces que quieren defender la educación pública se hicieron escuchar.
“Cuando el ex ministro hablaba de ‘educar para el mercado’, lo hacía en términos de gerente de recursos humanos, como él se definió. En una sociedad donde no hay trabajo, donde personas quedan por fuera del mercado laboral, ¿para qué los vamos a educar? A quienes quedan por fuera no es rentable educarlos, es un costo, porque son sujetos que después no van a darme rentabilidad en el mercado porque nunca van a entrar.” Así explicó Filmus la lógica del actual gobierno, y profundizó: “Hablar de capital humano es una contradicción. Lo que es capital no es humano, el humano no es un capital. Esa lógica ve al sujeto como un objeto –que tiene un costo–, por lo cual puede ser desechable”.
“El salón nos quedó chico”, se lamentó con una sonrisa Eduardo López, secretario general del sindicato anfitrión y uno de los acompañantes de Filmus en la mesa. La pata sindical, López y Sonia Alesso (secretaria general de Ctera) se ubicó a la izquierda de Filmus, mientras que a su derecha Graciela Morgade (decana de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA y licenciada en Ciencias de la Educación) y Sandra Carli (profesora e investigadora de la UBA y el Conicet), autoras de los artículos incluidos en el libro Pisaleaks y Management público, respectivamente, completaban la mesa.
Filmus dijo que el libro es “un volante grande, una herramienta de agitación”, e ironizó: “Es un volante trotskista, hasta tiene la letra chiquita”. “Tenemos que ser cientos de miles en las calles –enfatizó Alesso– para frenar a la derecha en Argentina y Latinoamérica. Hay que derrotar a Macri, que es enemigo de la democracia.”