A dos años del desastre ambiental provocado por el derrame de petróleo en una refinería operada por Repsol en Perú, las autoridades ambientales del país andino detectaron “una nueva presencia de hidrocarburos en el área del Terminal Multiboyas 2”en la misma refinería. La petroquímica española aseguró que el hecho no está relacionado con sus operaciones y que se trata de una “mancha migratoria”.
Unos 300 metros cuadrados fueron afectados por un nuevo derrame de petróleo, informó el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA). Las autoridades ambientales confirmaron que mantienen “acciones de fiscalización en la zona”.
El organismo ambiental de Perú indicó que durante una supervisión realizada durante el fin de semana advirtieron una nueva presencia de hidrocarburos “en el agua de mar superficial” en una terminal de la refinería La Pampilla.
Tras detectar la presencia de hidrocarburos, el OEFA le pidió a Repsol que reporte de “forma inmediata y urgente” sobre lo ocurrido y que tomé medidas para “evitar, minimizar o rehabilitar los impactos en el ecosistema marino y verificar las causas de la emergencia ambiental”.
El OEFA confirmó que se mantendrá en el área para verificar que Repsol cumpla con las medidas de seguridad. El hecho fue registrado durante el sábado, y según el OEFA hasta la noche del sábado la petroquímica española todavía no había remitido el Reporte Preliminar de Emergencia Ambiental sobre el caso.
Desde La Pampilla aseguraron que el hallazgo de petróleo “no tiene relación con operaciones” de la refinería ni con lo ocurrido en enero de 2022 y que se trata de una “mancha migratoria”.
"La Terminal Multiboyas 2 de la Refinería La Pampilla no está operando desde enero del 2022. Dicha instalación no tiene presencia de hidrocarburos en toda su extensión", señalaron en un comunicado.
El peor desastre ecológico
La Pampilla es la principal refinería de Perú y es operada por el gigante petroquímico Repsol. El 15 de enero de 2022 La Pampilla fue el escenario de un gran derrame de petróleo.
El hecho ocurrió cuando el buque petrolero italiano Mare Doricum descargó petróleo en la refinería ubicada en Ventanilla, un municipio a unos 20 kilómetros al norte de Lima.
La ONU lo llamó “el peor desastre ecológico en la historia del país”. El litoral de Lima fue contaminado con 11.900 barriles de crudo, según las autoridades peruanas. Aunque según Repsol fueron 10.396 barriles.
La semana pasada, Repsol aseguró que llegó a un acuerdo con cerca del 90% de las personas afectadas por el derrame de crudo ocurrido en enero de 2022 en La Pampilla.
El Padrón Único de Afectados cifra en 10.273 las personas que deben ser compensadas por los efectos del derrame, según datos del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
Un estudio realizado el pasado marzo por el Ministerio de Ambiente (Minam) certificó que "un total de 20 formaciones costeras (entre playas, acantilados, puntas, islas e islotes) y 4 áreas de mar adentro exceden los estándares de calidad ambiental".
En su último comunicado, el OEFA informó que ordenó 20 medidas preventivas y, tras verificar el incumplimiento de siete de estas, impuso multas, que Repsol ya pagó, así como mandatos para la presentación del Plan de Rehabilitación (PDR) para las zonas afectadas por el derrame de 2022.