La Justicia Federal denegó la cautelar presentada por el diputado, precandidato a gobernador y exreferente del PRO en Mendoza Omar de Marchi, quien había solicitado frenar la intervención del partido en esa provincia, medida dispuesta por la conducción nacional del partido.
La medida resuelta por la cúpula encabezada entonces por Patricia Bullrich, quien luego pidió licencia a ese cargo, desconoce la presidencia del partido a nivel provincial del diputado Álvaro Martínez y reafirma la potestad del senador nacional Humberto Schiavoni como interventor por 30 días.
La jueza federal porteña con competencia electoral María Romilda Servini resolvió que resultan insuficientes los argumentos invocados y rechazó la medida cautelar de no innovar respecto de la intervención del partido.
De Marchi tensó la cuerda en su disputa con el senador nacional radical Alfredo Cornejo, precandidato a gobernador por Cambia Mendoza, y decidió ir por fuera, por lo que el Consejo Directivo del PRO nacional resolvió hace dos semanas la intervención del partido.
Por su parte, los seguidores de De Marchi, que ante la falta del paraguas del PRO y de su simbología llamó a su nueva agrupación La Unión Mendocina, minimizaron el revés judicial argumentando que la Justicia no se pronunció sobre la cuestión de fondo. El apoderado del frente La Unión Mendocina, Germás Vicchi, dijo que "la Justicia federal no se ha pronunciado aún sobre el fondo de la demanda de nulidad de la intervención (por 30 dias), presentada por el PRO de Mendoza. Recién ahora se correrá traslado de la misma al partido PRO nacional, dándole un plazo para contestar". Vicchi argumentó que el fallo final "carecerá de importancia desde lo electoral, porque nada hará variar que el PRO está en el frente La Unión Mendocina, más allá del sello o de algunos dirigentes aislados".
