Pasan los días y el oficialismo sigue sin lograr ordenar políticamente el espacio de cara al proceso electoral que se aproxima. Por más que existen mesas chicas en la que se sostienen diálogos subterráneos para intentar resolver las cuestiones técnicas y burocráticas, en paralelo siguen las declaraciones cruzadas --y a cielo abierto-- entre los distintos espacios que conforman el Frente de Todos. El presidente Alberto Fernández, en tanto, más allá de las presiones que le imponen con firmeza desde el kirchnerismo, no tiene pensado dar definiciones en el corto plazo sobre si será o no candidato. Así lo confirmaron a este diario desde su entorno y aclararon que no hablará de ese tema en la reunión que convocó este viernes en la sede del PJ nacional de la calle Matheu. En el encuentro que se hizo en el mismo lugar en febrero de este año, los distintos referentes del kirchnerismo le pidieron a Fernández --durante cinco horas y media-- que se expida al respecto y él no lo hizo. Esta vez, adelantan, tampoco lo hará.
En Casa Rosada argumentan que "falta mucho tiempo", para que sea necesario tomar ese tipo de definiciones y recuerdan que en 2019 el candidato y la fórmula presidencial del espacio fueron anunciadas por Cristina Fernández de Kirchner el 19 de mayo. Es decir, calculan que aún falta un mes para que algo de esas características suceda. En aquel momento pasaba algo similar a lo que ocurre ahora: los anotados para presentarse como candidatos a presidente eran Felipe Solá y Agustín Rossi y ninguno terminaba de medir bien en las encuestas. Nadie sabía lo que iba a pasar, pero todo cambió con la decisión y el anuncio sorpresivo de CFK. Hasta hace unos meses en el oficialismo esperaban que el candidato de unidad pueda ser el ministro de Economía, Sergio Massa, pero esa posibilidad es cada vez es más compleja por los altos números de inflación --muy lejanos a lo que el ministro había prometido para abril-- y por la escalada del dólar, entre otras cuestiones. Fernández, por ahora, no se bajará de su posible candidatura para la reelección porque considera que no hay ningún precandidato que mida bien en las encuestas. Ese escenario, por supuesto, cambiaría rápidamente si CFK decide postularse o marcar a alguien como su elegido para que compita.
Esta vez el deseo del Presidente sería que la definición de la fórmula sea tomada en conjunto entre la vice, él y el ministro de Economía más cerca de la fecha. Lo cierto es que para eso tendría que haber una reunión entre ellos, cosa que todavía no sucede. En esa línea, Eduardo de Pedro insiste en declaraciones públicas que el camino no será ese, sino que la definición la tomarán los votantes mediante las PASO. Recuerda que así lo pidió Fernández y asegura que así lo tendrá.
El ministro del Interior este miércoles volvió a criticar al Presidente y a su entorno. En declaraciones televisivas habló una vez más de "funcionarios que no funcionan". Opinó que "la gente ve que no hay actitud y que no se está haciendo todo lo que tenemos que hacer", y que eso "genera desesperanza". "A ellos les vamos a ofrecer unas PASO, una alternativa en esta elección para poder recuperar el espíritu del peronismo, de los gobiernos de Néstor y Cristina y vamos a volver a poner en el centro a la política como herramienta de transformación y no de confort personal", disparó. Ante la consulta sobre si él cree que sigue habiendo funcionarios que no funcionan, remarcó: "todavía estamos con deudas con un sector de la sociedad. Así que sí, para mí sí". No especificó a quiénes se refiere en esta ocasión.
El jefe de gabinete, Agustín Rossi, que en los últimos días dejó la puerta abierta para una posible candidatura al decir que "si el Presidente dice que no va a ser, yo voy a evaluar esa posibilidad", también hizo declaraciones este miércoles que subieron el tono de la interna. Durante un acto que compartió con Leandro Santoro dijo que para él “hay logros de nuestro gobierno que merecen ser reivindicados, como por ejemplo haber entregado la vivienda cien mil, o haber bajado la desocupación y el crecimiento que tuvo la economía en los últimos dos años”. En esa línea, remató: “no he visto en el mundo nunca que gane una elección un candidato oficialista que no es oficialista. Por eso hay que estar preparados para dar las respuestas a quienes critican lo que ocurrió. No existe meter la cabeza bajo la tierra como el avestruz”.
En Casa Rosada, lejos de pensar en una reunión entre el Presidente, la vice y Massa para los próximos días, confían en que el peronismo siempre se ordena, y recuerdan que el Presidente dijo en reiteradas ocasiones que "él quiere ganar. No importa con quién". El viernes, por lo tanto, la mesa del Consejo nacional del PJ no traerá definiciones por parte del Presidente. Allí, dicen en Rosada, se acordó que solo se trazarán reglas burocráticas y necesarias para luego convocar al Congreso partidario y terminar de definirlas.
Desde el kirchnerismo seguirán con el operativo clamor para que la candidata sea la vicepresidenta y, en esa línea, llevarán adelante un acto el sábado en Ferro al que posiblemente asista el diputado y líder de la Cámpora, Máximo Kirchner. Él no estuvo en el acto anterior frente a Tribunales, que también organizó la mesa de Ensenada. El mismo sábado en la localidad bonaerense Ensenada habrá otra actividad: un "plenario de la militancia", que encabezará Victoria Tolosa Paz y se denominará "2023 será Victoria".