La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner visitó el centro de jubilados "Dame tu mano" de Lomas de Zamora, al que recientemente le cortaron el gas por no poder pagar las facturas tras los tarifazos. “Ya les cortaron el gas, por ahí les cortan la luz. Lo que no les pueden cortar es la esperanza y la voluntad de expresarse en democracia”, señaló CFK en la charla con los jubilados.
“No se puede vivir con terror a la factura de luz y de gas, es inhumano”, remarcó la precandidata a senadora en la provincia de Buenos Aires por Unidad Ciudadana. Luego de escuchar el relato de la situación que atraviesan los jubilados, con recorte en los medicamentos, un PAMI vaciado, maltrato en los bancos y una escasa “reparación histórica” para sus haberes, la ex mandataria advirtió sobre la reforma previsional que estudia el gobierno de Mauricio Macri.
Recordó que hasta ahora la plata que se destina al pago de jubilaciones proviene en un 43 por ciento de los aportes de los trabajadores y los empleadores y en un 57 por ciento de los impuestos a las Ganancias, a los combustibles y el IVA. Sostuvo que el plan del Gobierno es que esos impuestos ya no integren el fondo de los jubilados. “Por eso están hablando de que sea sustentable. Hablan de sustentabilidad y la sustentabilidad se la van a tener que dar los propios trabajadores con los aportes, por lo cual va a ser más chica la torta”, sentenció la ex presidenta.
“Esto está escrito, está estudiado junto con el Fondo Monetario Internacional y va a impactar brutalmente”, continuó Cristina Kirchner y dijo que esa medida “ya está impactando” porque en paralelo a la escasa Ley de Reparación Histórica -que en algunos casos fue de 130 pesos- se creó la Pensión Universal. “En realidad es una limosna porque es el 80 por ciento de la mínima y cuando el pensionado fallece no le queda a su esposa o su esposo como es el derecho jubilatorio”, definió.
La ex mandataria añadió que junto a ese ajuste el macrismo piensa introducir un sistema de “jubilación para los ricos” donde harían aportes a un sistema de capitalización y esos aportes se descontarían de Ganancias. “O sea, la vieja Argentina como digo yo: los pobres más pobres que nunca y los ricos más ricos que siempre”, completó.
Por último, CFK dijo que su preocupación es ”que frente a esta caída del consumo y de la recaudación, quieran manotear la caja de los jubilados”. A pesar de ello, llamó “tener la esperanza de que las cosas se pueden cambiar a partir de la decisión que cada ciudadano toma en democracia”. “Van a tener que escuchar cuando el pueblo se pronuncie”, concluyó.