Mientras se espera la publicación del decreto para el llamado a licitación de la Vía Navegable Troncal y frente a las críticas de los sectores privados respecto a que su administración quede en manos estatales, Pedro Wasiejko, actual presidente de Astillero Río Santiago y secretario General de la Federación de Trabajadores de la Energía, la Industria, Servicios y Afines (FeTIA-CTA) aseguró que la Administración General de Puertos que está actualmente a cargo del control del canal troncal ha demostrado que el Estado puede hacerse cargo de su gestión de manera eficiente y reduciendo los costos, lo que implica un beneficio para todos los sectores, incluso para aquellos que cuestionan la gestión estatal”. Wasiejko sostuvo que el Estado debe mantener la administración del Canal Troncal y que “en caso de avanzar con la licitación para las obras de dragado es necesario que se contemple hacerla en tres tramos para darle una oportunidad al desarrollo de una empresa pública ya sea Sociedad del Estado o mixta, a empresas de capitales nacionales e incluso también que pueda haber una competencia regional, para no terminar atados a un solo operador en el tema del dragado”.
Para el dirigente es imprescindible que la licitación "obligue a quienes se hagan cargo de algún tramo del canal troncal, sean de capitales públicos o privados, nacionales o internacionales, a destinar parte de las ganancias a la construcción de embarcaciones de dragado y balizamiento en el país que permitan luego sostener las operaciones de dragado que se requieren para el mantenimiento de la vía navegable. Tenemos en el país una industria naval que está absolutamente desaprovechada, que tiene capacidad para construir las embarcaciones que requiere nuestro país, generar valor agregado y desarrollar toda una serie de proveedores locales que implica a su vez la generación de nuevos puestos de trabajo de calidad”.
En relación a los planteos realizados por la Bolsa de Comercio, la Cámara de Puertos y el Centro de Navegación sobre la administración del Canal Troncal en los que sostuvieron que la administración privada demostró ser eficiente y que no les genera confianza a largo plazo la operación estatal, Wasiejko sostuvo que “se trata de afirmaciones falsas y totalmente ideologizadas que están lejos de contar con un respaldo técnico. Lo que sí está demostrado es que la administración del canal troncal por parte de los privados tal como lo diseñaron en los 90 Menem y Cavallo benefició solo a los accionistas de Hidrovía S.A., que tuvieron una alta rentabilidad, pero que no invirtieron los recursos en la industria local y en el desarrollo de los puertos públicos sino que siempre priorizaron los intereses de algunos privados”.