El Dr. Javier Parissi (Mat. 4 Libro 65, folio 3), en representación de los herederos del Sr. Juan Carlos Lizárraga comparece ante este juzgado con la intención de presentar demanda contra el Club Atlético Quo Vadis (en adelante “el demandado”) para hacer cumplir las condiciones estipuladas el contrato firmado entre las autoridades del demandado y mis representados, documento que adjunto.

"Club Atlético Quo Vadis.

Por medio del presente contrato, el Sr. Pedro Villagra, como presidente en funciones y en representación de la Comisión Directiva del Club Atlético Quo Vadis se compromete en representación de la entidad a alojar en el campo de juego donde lo haga el primer equipo en competencias oficiales (preferencialmente en la zona del “Carrilero por derecha”, también llamado “ocho” o “insider derecho” en la vieja denominación) las cenizas mortuorias del Sr. Juan Carlos Lizárraga, Libreta de Enrolamiento Nº 5.434.687 en el momento en que sean entregadas a esta comisión por sus familiares.

A cambio de ese beneficio, el Club Atlético Quo Vadis recibe en este acto la suma de 20.000.000 (veinte millones de pesos) que serán depositados en la cuenta corriente del banco y utilizada para fines sociales.

De no cumplimentar ese pedido, el club deberá indemnizar a los herederos por la suma indexada al momento del cobro.

Deseando que aún quede mucho tiempo para la concreción de la primera parte del contrato, firman de conformidad los interesados".

Pedro Villagra. Presidente. Juan Carlos Lizárraga. Socio nro. 322

De no mediar solución, mis representados iniciarán acciones judiciales contra la entidad, de acuerdo a lo consignado en las cartas documentos de fechas 3 de marzo, 4 de abril y 10 de junio del presente año.

Sin otro particular, saludo a usted amistosamente. 

Dr. Javier Parissi

-Es increíble. Como rompen los huevos con eso.

-Vos lo dejaste dormir, te hiciste el boludo y acá estamos

-Nunca me imaginé q iban a llegar a esto.

-El contrato es claro. Tiene razón. No podemos hacer nada. Dice campo de juego. Cagamos.

Los miembros de la Comisión Directiva lo miraron azorados y desahuciados.

-Pero mirá si vamos a hacer terrible movida por un viejo caprichoso.

-Un viejo caprichoso que puso veinte palos cuando nos estábamos yendo a la B. Con esa guita compramos tres árbitros, dos arqueros y pagamos los sueldos de todo el personal. Y nos salvamos…

-Pero eso ya se hizo en la cancha vieja. Ya está, es cosa juzgada.

-No hables al cuete si no sabés. El "campo de juego" del club no está más en la avenida San Martín. Está en barrio Cairo. Te recuerdo que nos mudamos hace un año. Y que aquello es un baldío hasta que la empresa que nos compró decida hacer el proyecto.

-¿Qué dice el abogado?

-El abogado le da la razón a ellos. El viejo se cubrió bien. "Campo de juego competencias oficiales". Como si hubiera sabido que nos íbamos a trasladar.

-¿Y qué dice el ingeniero de la pericia?

-Dice que, como no se puede saber exactamente dónde quedaron las cenizas, hay que trasladar unos 10 x 70 metros de superficie x 50 centímetros de profundidad del terreno actual a la cancha nueva. Salvo que vos prefieras pagar y en ese caso no sé de dónde vas a sacar la guita.

-¡¡50 centímetros!! Me jodes. Negociemos algo menos. 20, 25.

-La pericia dice 50. Veamos que podemos hacer.

-¿70 metros? ¿Quién era? ¿Sonic? ¡Si ahora un 8 no te pisa el área ni en pedo!

-¿Quién mierda es Sonic?

-Debe ser un croata o un serbio…

-Pero era un 8 de los de antes, corrían más

-Es un choreo…

-Y bueno. Hay que hacerlo. Démosle épica por lo menos.

-¿Épica? Llevar 350 metros cúbicos de tierra a veinte cuadras de distancia, ¿Épica? ¿Qué épica va a tener eso?

-Qué se yo, tipo campaña publicitaria.

-Son cincuenta volquetes. Son trece carretillas por metro dice Internet. Cinco mil por trece me da más de seis mil carretillas más o menos.

-"Pedro vuelve" podríamos ponerle.

-Pero no está volviendo. Se está yendo.

-Es ridículo esto. ¿Hablaron con los hijos?

-Les hijes, hay de varias identidades de género.

-Bueno. ¿Hablaron con les hijes?

-Son unos hijos de puta.

-Hijes…

-…

-No hay caso. No aflojan. Y el abogado es otro guacho.

-El abogado cumple con la ley.

-¿Y el nuestro?

-Ya te dije, no puede hacer nada. Pedro dejó todo atado acá acá abajo, como en la Biblia… "lo que ates en la tierra será atado en el cielo"...

-Te tiro una buena. Desde que murió Pedro e hicimos el maneje de las cenizas no perdimos ningún clásico, capaz que ese argumento cuenta. Y este año los primos van a ascender…

-¿Está chequeado eso? Hablaron con Carlitos?

-Sí, creo que sí…

-Pero esperá: imaginate cinco mil carretillas… por las calles del barrio llevando las cenizas de Pedro Lizárraga "El socio que dio todo por el club."

-Cenizas que -aclaremos- nunca perdieron un clásico.

-Qué se yo… votemos

¡Ya lo tengo! ¿Si lanzamos una campaña de asociados a cambio de una carretilla? Hablamos con la fábrica, que nos la dejen baratas. Salen doce lucas al público. Que nos la deje a seis, cobramos diez lucas la inscripción y nos quedan cuatro lucas por socio. Si hacemos tres mil, es una guita. En todo caso, le ofrecemos ponerle el nombre del socio a cada escalón de la tribun…

-¡¡Ni en pedo!!! Mira el quilombo que se armó por una boludez de esas. Nada. Hasta las carretillas ponele, me lo banco. Más, no.

-Pero hagámoslo.

-Por la palabra empeñada

-¡¡Qué palabra empeñada!! Primero por que no podemos pagar la guita del juicio y segundo y principal porque no podemos cargar con una maldición de ese tipo. Con los muertos no se jode. Me da miedo. Una puerta 12 o eso que le pasó al Liverpool…

-Pero si acá no se llena nunca…

-Eh, uno nunca sabe. No quiero deber eso. Un muerto enojado te puede mandar a la B. No tengo dudas.

Diario de San Martín, 11 de diciembre de 20…

Pedro lo hizo

El día de ayer, una comunidad se unió bajo las banderas de la memoria y la palabra empeñada. Cinco mil personas de la localidad de San Martín trasladaron en sus carretillas unos 350 metros cúbicos de tierra, entre las que se encontraban las cenizas de un socio desde la antigua cancha del club Quo Vadis hasta el actual predio de barrio Cairo.

Durante cuatro fines de semana la espectacular caravana cumplió el acuerdo firmado por el club con el socio Pedro Lizárraga, quien pagó una fuerte suma de dinero para que sus cenizas estén en el campo de juego del club. "Desde el primer momento sólo pensamos en realizar el traslado, estábamos esperando el momento justo, pero ya no queríamos demorar mas. Era una deuda de honor." afirmó el presidente de la entidad.