Espantados y/o preocupados. Así están los triunviros de la CGT ante la situación económica que impacta en los salarios y extiende en el tiempo las negociacionaes paritarias. Esto afecta a la política pero sobre todo al futuro electoral del Frente de Todos que integran y acompañan. Este es el contexto al que la central obrera llega al Día del Trabajador y Trabajadora, una fecha que será conmemorada con un acto previsto para el martes 2 de mayo. El detalle sobresaliente es que en esta oportunidad estarán presentes Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano. Las diferencias, que existen, han quedado de lado. Las opciones políticas que surgen de la oposición, y según las encuestas con posibilidades de triunfo, son absolutamente inconvenientes para los derechos de los y las trabajadoras.
El acto se realizará en el estadio Defensores de Belgrano, ubicado en la avenida Av. Comodoro Rivadavia 1450, del barrio porteño de Núñez. Tiene como horario de inicio la 15 y una vez que los triunviros hablen comenzará la desconcentración. Al menos es lo que tienen acordado los tres. El orden de los discursos es parte de una charla que todavía se deben. Hay otro tema y son los invitados especiales. Hace unos días daban por sentado que estaría presente Sergio Massa, ahora hacen silencio.
La primera señal de que algo había cambiado (al menos de manera temporal) en la convivencia de la conducción de la CGT, fue durante la reunión del consejo directivo del jueves de la semana pasada. No hubo discusiones, ni críticas entre el tándem Daer-Acuña y Moyano. Cuando se habló de realizar el acto hubo acuerdo y una vez que se definió qué dirigentes integrarán el comité organizador, se escuchó un corto aplauso en el salón del cuarto piso.
Hay un elemento político que también hizo de aglutinante: la figura de Sergio Massa.
Bien se podría decir que Daer y Acuña son hombres de Massa. El hombre de Sanidad fue diputado nacional por el Frente Renovador y el titular de los estacioneros diputado bonaerense. Siempre estuvieron cerca del tigrense y el vínculo que éste tenía con Alberto Fernández hizo que los gremialistas rápidamente se alinearon con el Presidente. Además, eso les permitía incoporarse en el FdT sin estar demasiado cerca de Cristina Kirchner.
El sector que responde a Pablo Moyano se acercó a la vicepresidenta desde un primer momento. Varios gremios del Frente Sindical para el Modelo Nacional y todos los de la Corriente Federal de Trabajadores llevaron al camionero a relacionarse y unirse cada vez más con CFK. Ahora bien, la relación cada vez más estrecha del kirchnerismo con Massa ante las idas y cada vez más vueltas de Alberto Fernández.
Una situación que terminó por acercar y unir, aunque sea de manera transitoria, a los triunviros, que se recelaban desde el momento que habían sido electos como conductores de la CGT. El año pasado, por caso, el 17 de octubre no hubo acto en común. El sector de Moyano marchó a Plaza de Mayo y Daer con Acuña organizaron la mesa sindical con la que pensaban discutir y negociar lugares en las boletas legislativas de este año. En agosto pasado marcharon todos juntos contra la inflación, el acuerdo era sin escenario ni discursos, pero el camionero hizo un mini acto arriba de un acoplado donde le reclamó al Presidente que "ponga lo que tenga que poner" para defender el salario de los trabajadores. Esta vez no habrá marcha pero sí un escenario y discursos. Los tiempos electorales así lo exigen.
Los que harán un acto el mismo 1° de mayo son los gremios enrolados en las 62 Organizaciones a partir de las 11 en la sede sindical. Son gremios considerados pequeños y alejados del FdT. Los otros que se movilizarán son los que integran la CTA Autónoma, que lideran Hugo Godoy y Ricardo Peidro, y marcharán junto a organizaciones sociales en rechazo de "las políticas del FMI".