Este domingo se cumplen 46 años de la primera ronda de las Madres en Plaza de Mayo, cuando un grupo de mujeres rompió con lo establecido por la sanguinaria dictadura y comenzó una caminata en reclamo de la aparición con vida de sus hijes detenidos desaparecidos durante el terrorismo de Estado. Para conmemorar este nuevo aniversario, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora organizó una jornada especial en la Casa nuestros hijos, la vida y la esperanza, en la ExEsma. "Hemos recordado a nuestras queridas madres, las que están y las que no, con alegría", contó Taty Almeida, referente del movimiento de derechos humanos, y una de las partícipes del evento.

En diálogo con Página/12, Lidia Miy Uranga, más conocida como Taty Almeida, comentó que "hicimos una reunión con gente querida, con gente que tiene memoria, con personas que nos han acompañado siempre, y sobre todo con muchos jóvenes". 

Asimismo, la referente destacó el clima festivo que se vivió en el predio de la ex-Esma, donde los presentes pudieron disfrutar de las actuaciones de La Popular Compañía de Danzas y de la Escuela de Música Popular. "Hemos recordado a nuestras queridas madres, las que están y las que no, con alegría. Por supuesto con nostalgia desde ya, pero con alegría, porque así tenemos que recordar a todas. No somos unas personas amargadas que nos quedamos rumiando el odio y el dolor, de ninguna manera", sostuvo.

Además, durante el evento, convocado bajo la consigna "46 años de Lucha", se vivieron momentos emotivos al recordar la valentía de esas 14 mujeres que, un 30 de abril de 1977, marcharon para reclamar al entonces dictador Jorge Rafael Videla una audiencia para saber el paradero de sus hijos desaparecidos.

"Hace 46 años, salimos como locas, como nos llamaron. Locas de dolor, de rabia, de impotencia, porque nos arrancaron lo más preciado que tiene una mujer, que es un hijo. Pero no aceptamos que nos digan heroicas porque hicimos lo que cualquier madre hace por un hijo, por supuesto en circunstancias muy especiales", recordó Taty. 

Esa lucha que comenzó hace casi cinco décadas continúa vigente, reconoció Almeida, puesto que "a pesar de que quedamos muy pocas Madres y Abuelas, estamos tranquilas porque esa posta la están recibiendo los jóvenes". 

"Esa posta que la ponen en marcha y en vigencia, es la memoria, la militancia, de todas esas personas que nos demuestran que ellos son los que van a continuar cuando ya no estemos", cerró.