Lucy está aterrada. Asegura que fueron 12 años de violencia que vivió junto a su ex marido Fabricio Allione, quien además de golpearla salvajemente la amenazó de muerte en repetidas oportunidades. El miércoles, después de casi 3 años, iniciará el juicio por las lesiones, amenazas y restricciones por las que fue acusado. Ella aún teme que aparezca en su casa y la mate junto a sus dos hijos.
Fue en 2020, luego de ser internada por los golpes que él le propinó, pese a que ella cargaba a su hija de dos meses en sus brazos, finalmente se animó a denunciarlo. “Me volteó piezas dentarias, me dejó llena de moretones y perdí parcialmente la vista y eso aún me dura”, cuenta Lucy a Catamarca/12.
La mujer cuenta que era tanto el terror que le tenía, que aún ese miedo perdura. “Cuando me golpeaba yo entraba en shock, me quedaba quieta no podía reaccionar ni pedir ayuda”, recuerda. Cuando finalmente lo pudo acusar, la Justicia no actuó de manera acorde.
Él incumplió restricciones, la amenazó e incluso se metió en su vivienda con un cuchillo que sólo quitó de su cuello cuando su hijo de 8 años ingresó al dormitorio y lo vió.
“Él comete atropellos notables, sabiendo las restricciones. Recuerdo que la segunda vez que lo denuncié estuvo 3 días preso, fue cuando salió fue que ingresó con el cuchillo en la mano. Viví porque mi hijo lloró”, cuenta.
Recién cuando ella radicó la sexta denuncia, Allione fue preso preventivamente. “Estuvo 90 días y salió en noviembre del año pasado. Le pusieron una pulsera rastreadora y a mí me dieron el botón antipánico. También le prohibieron volver al departamento en donde vivo, Andalgalá. Pero una vez, que mi mamá estaba internada en la ciudad me lo encontré en la Terminal y el botón sonaba y nadie acudió, es imposible que yo no tenga miedo”, explica.
Lucy explica que el miedo que siente es demasiado. “Hasta el día de hoy no puedo dormir. Es un tormento que tengo. Pido a gritos que esto termine porque ya no es vida para mí. Tengo miedo porque lo conozco, el daño psicológico lo tengo. Estoy esperando que llegue el juicio pero el miedo es cada vez más, siento que en estos dos días (hasta el 3 de mayo día del debate) aún puede venir y matarme a mí y a mis hijos”, relata.
“Necesito que los jueces que van a juzgarlo entiendan que es grave. Que él quiso matarme, que no fueron sólo lesiones, que es peligroso. Pero sobre todo que me den la seguridad de que yo pueda vivir tranquila. Y que élno vuelva a vivir en el departamento”, resalta
Debate
Allione está imputado por un hecho de lesiones graves agravado por violencia de género y un hecho de lesiones leves también agravadas. Además tiene tres acusaciones por restricciones y dos por amenazas simples”. El debate se hará el día 3 de mayo en la Cámara en lo Criminal de Tercera Nominación.
“La última vez que lo vi fue cuando se lo llevaba la policía. Incluso en ese momento él me gritó que cuando saliera vendría a pegarme un tiro a mí y a mis hijos”, concluye.
Pese al terror que siente, Lucy no tiene actualmente acompañamiento psicológico, policial o de contención por parte del Estado.