Tras los insultos y reclamos de los hinchas del Paris Saint-Germain (PSG) a Lionel Messi y otros jugadores, el club francés decidió reforzar la seguridad en el centro de entrenamiento Camp des Loges y en las inmediaciones de las casas del capitán de la selección argentina, Neymar Jr. y Marco Verrati.
Por los últimos resultados negativos del club, que fue eliminado por el Bayern Munich en la UEFA Champions League, quedó afuera de la Copa de Francia y cayó el fin de semana pasado ante Lorient –por tercera vez consecutiva de local–, un grupo de aficionados que se autodenominan “Colectivo de Ultras París” se congregaron ayer por la tarde en la sede del PSG en Boulogne-Billancourt.
Los cánticos de los cientos de “ultras” apuntaron en particular contra el director técnico Christophe Galtier y algunos de los jugadores extranjeros –Messi, Neymar y Verrati–. De hecho, al brasileño –lesionado hasta final de temporada– fueron a insultarlo en frente de su domicilio, ubicado en la comuna parisina de Bougival. “Neymar, lárgate”, cantaron según informó AFP.
Qué dijo el PSG sobre los insultos a Lionel Messi
Este jueves, en tanto, el PSG decidió incrementar el personal de vigilancia del centro de entrenamiento del club, y delante de las casas de los tres futbolistas apuntados en los cánticos. "El París Saint-Germain condena con la mayor firmeza los actos intolerables e insultantes de un pequeño grupo de individuos que tuvieron lugar el miércoles", expresó la institución en un comunicado.
"Sean cuales sean las discrepancias, nada puede justificar tales actos. El club aporta todo su apoyo a sus jugadores, a su dirección y a todas las personas afectadas por esos comportamientos vergonzosos", agregó el documento.
El PSG sancionó a Lionel Messi y no renovará su contrato
La tensión por los malos resultados se da en medio de otra situación delicada en torno al contrato del crack argentino. El club decidió este miércoles suspender a Messi por dos semanas sin goce de sueldo luego de que el rosarino viajara a Arabia Saudita y permaneciera allí durante dos días sin autorización de los directivos.
Aunque la sanción del club no prevé una multa económica, sí contempla que el Diez no cobrará su sueldo durante estas dos semanas de suspensión, lo que significará al menos impacto menor en sus finanzas personales.
El campeón del mundo se lleva por contrato 39.600.000 de euros al año. Eso significa que su salario mensual es de 3.250.000 de euros por mes. En tanto, por estas dos semanas de suspensión, el capitán argentino perderá alrededor de 1.625.000 euros.
Junto con las protestas de ayer, los “ultras” sacaron un comunicado en donde se mostraron “sinceramente preocupados en relación al futuro y a la sostenibilidad” del club, donde preguntaron "si hay aún un piloto en el avión".
“La temporada es ridícula. Desde que el mercado de invierno fue completamente fallido hasta las prestaciones sobre el terreno de juego, tenemos jugadores que no luchan por nuestros colores, que no respetan al club", comentó uno de los manifestantes a AFP.