Los patentamientos de maquinaria agrícola registraron en abril un incremento del 2,4 por ciento respecto del nivel de marzo, aunque el interanual se ubica 4,8 por ciento abajo y el acumulado del primer cuatrimestre muestra una caída del 2,9 por ciento frente al mismo período de 2022, de acuerdo con el informe difundido hoy por la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara).
Si bien estos datos marcan un escenario negativo, asociado a la histórica sequía, no termina de reflejar el relato que muchas veces plantea el propio sector agropecuario acerca de que hay una crisis total en las finanzas de los productores que ameritaría la eliminación de retenciones.
Los analistas de Acara advierten que "la demanda de equipos se mantiene sostenida a pesar de la pésima campaña gruesa producto de la sequía", aunque se preguntan "si estamos viendo los últimos coletazos de la inercia del año pasado".
"Al analizar los números detallados por producto, encontramos que no se observa una tendencia uniforme en toda la maquinaria autopropulsada. Si bien las cosechadoras y las pulverizadoras han experimentado una caída de dos dígitos en comparación con el año anterior, en el caso de los tractores se observa una estabilidad con niveles similares a los del año pasado", agrega la entidad.
En lo que respecta a tractores, en abril se patentaron 450 unidades. John Deere lideró este segmento, con el 41 por ciento de la cuota de mercado, secundado por New Holland, con el 16 por ciento y luego Pauny, con el 14 por ciento.
En cuanto a las cosechadoras, se patentaron 54 unidades, un 11,5 por ciento menos que en marzo y un 18,2 por ciento menos que en abril del año pasado, en tanto en el acumulado cuatrimestral muestran una caída del 15 por ciento. Las ventas de pulverizadoras subieron un 12,8 por ciento comparado con marzo y 6 por ciento respecto de igual mes del año pasado.
El informe de Acara dice que "es probable que los productores continúen invirtiendo en la renovación y el uso de tecnología, y si las condiciones para la campaña 23/24 son favorables, tanto en clima como a nivel financiero, la caída en volúmenes de venta puede estabilizarse o inclusive, reducirse a un dígito".
La relativa estabilidad en el movimiento inversor en maquinaria agrícola estaría dado también por el gran colchón acumulado en los últimos años por el sector, que gozó de buenos rindes y sobre todo, excelentes precios internacionales.
"Una vez que pase la campaña gruesa, en la que generalmente se produce una disminución en los volúmenes debido a la estacionalidad, podremos observar la verdadera cara del mercado en un año de campaña magra e incertidumbre política y económica", concluye Acara.