La Piazza del Plebiscito, en la ciudad de Nápoles, estalló este jueves con fuegos artificiales que iluminaron el cielo de la noche, apenas terminó el partido entre el Napoli y el Udinese, que consagró al club local en su tercer scudetto.
Fue empate 1 a 1, pero para los tifosi que salieron a las calles lo único que importó es que agregaron su tercera estrella, después de 33 años. Aquellos otros dos campeonatos de la Serie A, Napoli los había logrado de la mano de Diego Armando Maradona, en 1987 y 1990.