No sólo la fuerte manifestación de compromiso de Lula con el futuro de Argentina en su renegociación del acuerdo con el FMI, sino por sobre todo la dura caracterización que hizo el mandatario brasileño sobre la crítica situación económica de nuestro país, sigue provocando reacciones y reflexiones desde distintas miradas. Más allá que del encuentro bilateral no surgieron todavía respuestas ni acuerdos concretos, lo que quedó expuesto es que la sola posibilidad de una alianza entre las dos principales economías del Mercosur para el intercambio comercial sin utilización del dólar abre una ventana hacia un posicionamiento geopolítico diferente de la región. Más aun teniendo en cuenta que las manifestaciones de Lula fueron formuladas al regreso de su viaje a Shanghai, China, donde participó del relanzamiento del Banco de los BRICS, ahora con Dilma Rousseff, su aliada y compañera de ruta, al frente de la entidad.
Entre diferentes ámbitos en los que se empezó a discutir sobre un posible cambio de escenario, uno de los que tomó con mayor profundidad el tema fue Alampyme, la organización regional nacida del Foro de San Pablo en 1997, que reúne a las organizaciones de las micro, pequeñas y medianas empresas de Latinoamérica con el objetivo de incorporar una voz distinta en el debate de ideas y proyectos. Con fuerte peso de las organizaciones pyme de México, Brasil y Argentina, principalmente, Alampyme tomó de inmediato como tema central el encuentro de Alberto Fernández y Lula Da Silva en Brasilia de esta semana, buscando darle impulso a un cambio de políticas económicas que deshagan las ataduras del FMI y retomen el sendero de la integración regional.
"La Asociación Latinoamericana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (ALAMPYME)
expresó su beneplácito por la declaración conjunta del presidente argentino , Alberto Fernández,
y de Brasil , Luiz Ignázio "Lula" Da Silva, para apoyar y fortalecer vínculos económicos,
comerciales y financieros ante un escenario de dificultades que atraviesa la región y, en
particular y en lo inmediato, la Argentina.", expresa la declaración difundida estre viernes.
"Es hora de fortalecer los vínculos regionales para afrontar desafíos comunes, complementar nuestras capacidades productivas, fortalecer y priorizar la defensa de las condiciones de vida de la población y nuestros recursos naturales y productivos" , afirma el documento titulado "Pymes latinoamericanas saludan acercamiento de Argentina y Brasil".
Sergio Miletto, uno de los fundadores de Alampyme y referente en Brasil de la organización, señaló en conversación con Página 12 que el documento surgió ante "la ventana de oportunidades que se abre para que la región vuelva a la carretera de la integración". Recordó que desde el año 2010, Alampyme enarbola la propuesta de "crear una unidad monetaria común para el comercio entre nuestros países", y ven necesario expresarse en respaldo de estas iniciativas para "disminuir las resistencias que, en general, las grandes empresas tienen hacia las iniciativas de gobiernos progresistas".
Los empresarios representados en Alampyme expresan que "el complejo e incierto marco internacional, de tensiones geopolíticas, mayores tendencias proteccionistas en grandes economías y aumentos de tasas de interés internacionales, tanto como las desarticuladoras devaluaciones competitivas, se reflejan en lo inmediato en desequilibrios en las balanzas de pagos, mayores tensiones y peligrosas presiones para la aplicación de medidas recesivas en las economías regionales, tal como se observa en relación al FMI".
"Necesitamos otro modelo", explicó Miletto ante la consulta de qué alcances tenía el rechazo a las políticas del FMI. "Los bancos centrales y el FMI trabajan a favor de los acreedores, tenemos que cambiar de concepción y el modelo económico. Somos grandes productores de alimentos, pero tenemos una enorme población pasando hambre. El hambre no es un problema de retraso tecnológico, es un problema político. Es estratégico provocar el empobrecimiento de la población, para poder absorber las materias primas no consumidas y enriquecer al Norte exportándolas", denunció. Es por ello que el documento incluye, según explicó, propuestas para cambiar el sentido de las políticas públicas impuestas por acuerdos como los del FMI.
"Alampyme entiende que la región atraviesa un período crítico clave, que convoca a motorizar sin demora políticas y acciones comunes concretas y viables", entre las cuales menciona:
- Asentar y ampliar mecanismos de pagos y créditos para impulsar el Intercambio comercial en monedas locales.
- Integración y complementación productiva, científica, tecnológica regional. Comenzar por áreas críticas inmediatas- soberanía alimentaria y energética , medicamentos e insumos para la salud, comunicaciones y transporte.
- Fortalecer el posicionamiento común de los países de América Latina, frente al relacionamiento con las economías centrales, al crecimiento de la discriminación y el proteccionismo y a las mayores presiones hacia ajustes macroeconómicos regresivos.
- Incentivar, defender y dimensionar el ahorro y la inversión productiva regional, a través de la coordinación, seguimiento y el control de movimientos de capitales especulativos, fugas y ocultamientos de operaciones financieras ilícitas.
- Dar mayor impulso a iniciativas y mecanismos de la integración regional --ALADI, Unasur, CELAC, ALBA, Mercosur--, pasando del positivo plano de las buenas intenciones declamativas al concreto y efectivo de los grandes desafíos que enfrentan nuestras sociedades.
Firman el documento las filiales y representantes de Alampyme de Brasil, Mexico, Bolivia, Chile, Perú y Paraguay, y por Argentina, Apyme (Asamblea de pequeños y medianos empresarios), Aiera (Asociación de exportadores e importadores), CEEN (Central de Entidades empresarias nacionales), CGP (Confederación General de la Producción, integrante de la CGE), Capyme (pequeños y micro empresarios de San Martín) e IESO (Instituto de Energía Scalabrini Ortiz).