En Misiones no hubo sorpresas. Tal como se esperaba, Hugo Passalacqua arrasó en los comicios de este domingo y gobernará la provincia mesopotámica por segunda vez (ya lo había hecho entre 2015 y 2019). Passalacqua reemplazará al frente del Ejecutivo provincial a Oscar Herrera Ahuad, quien a su vez asumirá como diputado provincial. El resultado confirma la hegemonía local del Frente Renovador de la Concordia, que no perdió una sola elección desde su conformación, hace ya 20 años.
Entrada la noche del domingo, y con poco más del 30 por ciento de las mesas escrutadas, Passalacqua se imponía con el 65 por ciento de los votos. En el segundo lugar se ubicaba el candidato de Juntos por el Cambio, el diputado radical Martín Arjol, por encima de los 20 puntos. Lo seguían, muy atrás, Isaac Lenguaza, de la "Fuerza de Todos" y Virginia Villanueva, del Partido Obrero. Los libertarios, por su parte, compitieron sin los símbolos de La Libertad Avanza y arañaban el 1 por ciento. Todas las fuerzas opositoras juntas apenas llegaban a juntar la mitad de los votos cosechados por el oficialismo local.
Para completar el paseo, el Frente Renovador de la Concordia se imponía en las 73 intendencias de la provincia que estaban en disputa. El actual intendente de Posadas, Leonardo “Lalo” Stelatto, logró la reelección. En El Dorado, en tanto, se produjo una de las pocas alternancias: Rodrigo “Pipo” Durán desplazó al actual alcalde Favio Martínez. Ambos compitieron, por supuesto, dentro del mismo frente oficialista.
Desde que Carlos Rovira destronó a Ramón Puerta en 2003, el Frente Renovador supo sostener en Misiones una hegemonía a prueba de cada elección. Con la de este domingo, ganaron seis elecciones consecutivas a gobernador. Como la Constitución provincial impide que gobernador y vice puedan ir por la reelección, la alternancia en los apellidos se impuso, aunque siempre dentro del mismo esquema de poder. El enroque entre Passalacqua y Herrera Ahuad, que se sucedieron respectivamente en la gobernación y en la legislatura provincial, es un ejemplo de esa dinámica.
Passalacqua, de 65 años y oriundo de Oberá, inició su militancia en la UCR, dentro de las filas juveniles de la Franja Morada, cuando estudiaba Comunicación Social en la Universidad del Salvador. Es uno de los impulsores del “misionerismo”, la definición política central del frente, que le sirve para mantenerse al margen de los armados nacionales, aunque sin esconder su cercanía primero con los gobiernos kirchneristas y ahora con el Frente de Todos. Su primer cargo importante fue como ministro de Educación y Cultura de Rovira, a partir de 2003. En 2015 asumió por primera vez la gobernación, con más del 75 por ciento de los votos. La buena imagen con que dejó en la gestión le sirvió para volver a ser entronado este año como el candidato oficial.
El gobernador electo le dedicó el triunfo a su jefe político, "el creador de este frente". "Tengo la seguridad de que lo que se viene para Misiones es espectacular", celebró. "No nos interesa lo que digan desde Buenos Aires, somos un espacio misionerista", cerró, en un intento por despejar interpretaciones políticas nacionales del resultado. "Estamos bien representados por lo que viene", agregó Rovira.
"Felicito a Passalacqua, que nuevamente tendrá la responsabilidad de gobernar Misiones", fue el saludo que llegó desde el peronismo, a cargo del ministro de Interior, Eduardo "Wado" De Pedro.
Pasadas las siete de la tarde, el ministro de Gobierno local, Marcelo Pérez informó que emitieron su voto el 75 por ciento de los 989.148 misioneros habilitados para sufragar. Una participación contundente teniendo en cuenta la lluvia torrencial que asoló a la provincia durante todo el fin de semana.