Más de 100 migrantes de países de América y Asia estaban privados de libertad en una "casa de seguridad" cerca de la frontera entre México y Estados Unidos. Las autoridades mexicanas indicaron que también detuvieron a cinco personas por su presunta responsabilidad en la extorsión y privación ilegal de la libertad de migrantes y sus familiares.
La ruta migratoria para llegar a Estados Unidos es una de las más peligrosas. En los últimos nueve años murieron más de 4.000 personas que intentaron cruzar hacia territorio estadounidense.
Todos los años miles de migrantes se arriesgan a las condiciones climáticas del desierto de Sonora y a los secuestros y la violencia de las bandas criminales en las comunidades que recorren hasta llegar a su destino.
También pagan miles de dólares a "polleros" o "coyotes" que se ofrecen a llevarlos hasta la frontera. Muchas veces los migrantes son abandonados al interior de camiones de carga o entregados a grupos criminales que operan en la zona.
Aplausos, gritos y rezos
Tras varios días secuestrados y en condiciones de hacinamiento,113 migrantes fueron encontrados en una "casa de seguridad" en San Luis Río Colorado, estado de Sonora, frontera norte de Méxicana. Las llamadas casas de seguridad son viviendas utilizadas por el crimen organizado para sus actividades delictivas.
La Fiscalía de Sonora indicó que entre los migrantes secuestrados había 29 personas de Ecuador, 12 de Colombia, 12 de Brasil, 12 de Perú, 11 de El Salvador, ocho de Cuba, siete de Honduras y cuatro de República Dominicana. También había migrantes de Asía: siete de Afganistán, seis de India, dos de Nepal y uno de Bangladesh. Además identificaron a dos personas de Estados Unidos.
El operativo comenzó la semana pasada tras la denuncia por el secuestro de 10 integrantes de una familia colombiana que se dirigía a la frontera para solicitar asilo. El grupo familiar estaba a punto de cruzar hacia Arizona, Estados Unidos cuando fueron secuestrados.
Tras esta denuncia las autoridades mexicanas siguieron la investigación hasta que dieron con una “casa de seguridad” en la colonia El Mezquite donde encontraron a 113 personas que estaban privadas de libertad y en condiciones de hacinamiento.
Según la fiscalía, cuando las personas que estaban en cautiverio advirtieron la presencia de las autoridades comenzaron a aplaudir, gritar, rezar hasta que los agentes intervinieron en su rescate. El grupo de más de 100 personas fue trasladado a la Academia de la Policía Municipal, donde recibieron atención médica y acompañamiento.
Además, las autoridades arrestaron en el acto a cinco hombres por su presunta responsabilidad en el secuestro y extorsión de los migrantes.
