La Justicia Federal abrió una nueva investigación penal contra el jefe narco de Alto Verde, Sergio "Zurdo" Villarroel, quien se presentaba como un próspero empresario del video cable que dedicaba su tiempo a fomentar el deporte en el club que presidía en el distrito costero. A fines de julio, el fiscal Federal N° 2, Walter Rodríguez, solicitó una vez más su indagatoria, en este caso por el presunto delito de lavado de dinero fruto del narcotráfico. El dato curioso radica que entre sus bienes, aparece un auto de alta gama, un BMW Z4 blanco, que manejaba el narco rosarino Martín "Fantasma" Paz el día que lo mataron a balazos.

Los investigadores se dieron cuenta de que el vehículo era el mismo que tenía Paz cuando lo mataron el 8 de septiembre de 2012, cuando recibieron los peritajes ordenados después de un allanamiento de una inmobiliaria ubicada en bulevar Gálvez al 1.700, casi esquina con Necochea vereda sur. Lo curioso es que ese auto debió ser secuestrado por la justicia luego del asesinato del Fantasma.

Puntualmente, se hicieron peritajes de una computadora y de la documentación que se secuestró, donde personal de Inteligencia de Prefectura Naval Argentina encontró fotografías del auto dentro de un galpón en Sauce Viejo, que pertenecía a Villarroel. Además, de las escuchas telefónicas surge que el narco de la costa tenía pleno dominio del coche, según consignó el diario El Litoral.

Si bien es una de las líneas investigativas más curiosas, el vehículo no está secuestrado en el marco de la causa, sino que "apareció desde los documentos", indicó una fuente del caso. Además, consultados sobre dónde creen que está el auto actualmente, los investigadores presumen que "pudo haber sido objeto de una transacción en Saenz Peña", en la provincia del Chaco, donde casualmente esta semana el juez federal Aldo Alurralde desbarató una organización de gran alcance que se escondía en el Impenetrable.

Los interrogantes son muchos, aunque la principal sospecha apunta a que el auto es un bien de cambio, producto de los negocios del narcotráfico.

Los investigadores sostienen que aunque no estaba a nombre de Villarroel es muy claro que el Zurdo disponía del bien como propio, porque lo intentó negociar en varias oportunidades.

Claro que la relación entre los Villarroel y los Paz no termina en el auto. A principios de 2017 se supo que el papá de Martín Paz, Luis Alberto Paz, se había mudado a Santa Fe y eligió para vivir la tranquilidad del country Los Molinos, donde habría ocupado dos casas. Producto de la labor de inteligencia surge que coincidentemente Villarroel se deshizo de una casa en el mismo barrio privado por la misma época, lo que permite suponer que ese es el otro extremo de la transacción.