Durante una sesión especial en el Senado de la Nación, el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, acusó a la Corte Suprema de ser “miembro del partido judicial” que encabeza la “persecución de dirigentes” peronistas, “defiende sectores corporativos”, se “mete en la autonomía de las provincias” y “se entromete en competencias de otros Poderes”. “Es un Poder que no tiene legitimidad democrática pero condiciona la vida democrática de los argentinos”, acusó.
“El desafío o uno de los desafíos de la democracia va a ser desarmar ese ese sistema de poder faccioso que no tiene legitimidad democrática pero que determina y compromete el funcionamiento de la democracia en la Argentina”, sentenció.
Las definiciones fueron hechas por el jefe de ministros durante el informe de gestión que brindó ante la Cámara de Senadores, en una sesión presidida por Cristina Kirchner. Además de un detalle de lineamientos del gobierno, fue también una apología del funcionamiento republicano y, en este sentido, una dura crítica a los sectores del Poder Judicial que guardan connivencia con los partidos opositores de la derecha.
El Partido Judicial
Habló de “la aparición de un partido judicial” integrado por “fiscales y jueces que han cooptado gran parte del funcionamiento del Poder Judicial y que no imparten justicia, sino que persiguen” a dirigentes peronistas que fueron parte de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
“Los miembros de la Corte Suprema son parte del partido judicial”, lanzó Rossi en un duro discurso que enumeró una a una las resoluciones del máximo tribunal, y los escándalos e irregularidades por los que es cuestionada en el Juicio Político que se desarrolla en el Congreso.
En este sentido, hizo una particular mención al fallo que suspendió las elecciones en Tucumán y San Juan, y lo relacionó con “el fallo proscriptivo” a Cristina Kirchner en la causa Vialidad.
“Lo que hicieron con las elecciones de Tucumán y San Juan” es una muestra de lo que “hubiesen hecho en el caso potencial de que Cristina Kirchner fuera candidata, a pesar de que no lo anunció” para las próximas elecciones nacionales, advirtió.
“Esto hubiera sido como lo que hicieron en Brasil con Lula, donde terminó siendo presidente Bolsonaro”, comparó al hacer referencia a la decisión de la justicia brasileña de ordenar la detención de Lula Da Silva en 2018 y dejar al Partido de los Trabajadores (PT) sin candidato a días de los comicios presidenciales.
“En 40 años de democracia, entre las peores instituciones que funcionan en la Argentina está la Justicia”, y eso queda demostrado “en cualquier encuesta que muestra los niveles de credibilidad”. El Poder Judicial “es un poder que no funciona”, sentenció aunque reconoció “las buenas intenciones” de muchos jueces y fiscales probos.
La suspensión de las elecciones en San Juan y Tucumán
Rossi también sostuvo que “el Partido Judicial no funciona solo”. “Tiene amigos, que son los dueños de los principales medios de comunicación”, dijo y citó como ejemplo una nota publicada hace días atrás en el diario Clarín que no solo advertía sobre el fallo de la Corte contra la autonomía provincial sino también sobre otro en la causa del Partido Justicialista Bonaerense.
“Clarín adelanta todo esto. Dijo que la Corte iba a expresarse antes de las elecciones sobre Tucumán y San Juan, y que también iba a pronunciarse sobre la legalidad de Máximo Kirchner al frente del PJ provincial. Así que estemos preparados para todo”, alertó.
En su alocución, el jefe de ministros hizo un repaso de cómo fueron los momentos previos al fallo contra las autonomías provinciales. Recordó que el expresidente Mauricio Macri había hablado de “provincias feudales” y que en la Comisión de Juicio Político del Congreso se daban detalles sobre cómo operaban las autoridades de la Corte en el manejo de la obra social de judiciales.
Suspendiendo las elecciones en Tucumán y San Juan “buscaron generar un impacto político de incertidumbre”, dijo y luego denunció la falta de avances en la causa por el intento de magnicidio contra CFK. “Es más, la foto de Lago Escondido es la flagrancia” de la existencia de esa connivencia entre medios de comunicación, sectores del Poder Judicial” y “sectores corporativos”, remarcó.
El funcionario advirtió que las consecuencias de las intervenciones de “ese suprapoder” integrado por jueces y fiscales afectan al gobierno actual pero también afectarán a los siguientes. “Tienen que desarmar este poder, porque si no lo desarman te gobiernan ellos”, dijo a los senadores de todas las fuerzas políticas presentes.
“Uno de los desafíos de la democracia va a ser desarmar ese ese sistema de poder faccioso que no tiene legitimidad democrática pero que determina y compromete el funcionamiento de la democracia en la Argentina”.
La estrategia de la oposición
La sesión comenzó con un breve entredicho entre la titular de la Presidencia de la Cámara alta y un senador de Juntos por el Cambio, que intentó objetar que el encuentro no se podía llevar a cabo porque no había quórum.
Es que la bancada opositora se había ausentado en su mayoría, tal su habitual maniobra para trabar el debate parlamentario. La respuesta de la vicepresidenta fue elocuente: “Pero senador, ya debería haber aprendido que no hace falta quórum para la sesión del día de hoy. Gracias”.
El crecimiento en los sectores productivos
La sesión comenzó con Rossi destacando la generación de empleo. Dijo que el Índice de Desocupación cerró en 6,3 por ciento en 2022, “muy por encima” de lo que dejó el gobierno de Mauricio Macri.
Luego hizo a partir de una férrea defensa de la intervención del Estado “frente al resurgimiento de discursos que tratan de estigmatizar” ese tipo de políticas, dijo y recordó que la lógica de Gobierno de dejar “todo en manos del mercado ha fracasado rotundamente”.
En este sentido se refirió al crecimiento en los índices de todos los sectores productivos y las obras de infraestructura coyunturales puestas en marcha por el gobierno de Alberto Fernández, como el gasoducto Néstor Kirchner, el impulso en el sector de hidrovías, el desarrollo del yacimiento de Vaca Muerta y el continuo repunte de la petrolera estatal YPF.
Anunció también la próxima reapertura de la planta de Fabricaciones Militares en la localidad de Azul, que había sido vaciada por el gobierno de Juntos por el Cambio con más de 300 despidos.
Esto se revirtió con la gestión del Frente de Todos a partir de la reincorporación de los despedidos y contratos de venta de productos a países de la región, como Perú. “No solo devolvemos el trabajo a quienes habían sido despedidos sino que orientamos la producción hacia la exportación”, destacó el jefe de Gabinete.